El Ballet Folklórico de México de Amalia Hernández, a lo largo de 67 años como institución, ha logrado reunir un sinfín de vestuario, fotografías y piezas escenográficas, las cuales busca exhibir en algún recinto para que el público pueda apreciar de ellas.
En entrevista con Notimex, Salvador López López, director general de la compañía, detalló: “La intención es buscar algo que albergue la gran cantidad de vestuarios, escenografías y una serie de imágenes históricas, porque Amalia Hernández participó con figuras como Siqueiros y Revueltas, grandes artistas de la época”.
Explicó que existe una filmoteca con más de 400 latas históricas, una fototeca con miles de imágenes, 27 mil piezas de vestuario y varios centenares de cintas sonoras que registraron el proceso de investigación que realizó su abuela, Amalia Hernández, en los estados de la República Mexicana, en específico con los grupos indígenas.
Por lo anterior, Salvador destacó la importancia de “generar un espacio para que la gente tenga acceso a conocer la historia de la compañía que ha sido extensa y basta”, pues la obra del Ballet también logró traducir la esencia de lo que sucede en los pueblos, festivales, danzas y épocas.
“La obra de Amalia logró montar escenografías interesantes de las culturas prehispánicas y le mostró al mundo la diversidad, el contraste, el colorido, fuerza y alegría del México místico y bravo, y se convierte en este mosaico de la cultura nacional en los años 60, 70 y 80”, abundó López López.
