Luego de que aparecieran los cuerpos de las dos menores de edad reportadas como desaparecidas, y tras la captura de dos personas, pareja, vinculadas con el homicidio de las niñas, la presidenta municipal usó su cuenta de Facebook para emitir un posicionamiento en el que transmite su indignación por semejante crimen.
En su texto, la alcaldesa anuncia endurecimiento de medidas al interior de su gobierno, para intentar a toda costa, que terribles hechos (feminicidio doble de las menores) como los registrados en el municipio, no vuelvan a repetirse.
Por igual, al interior de las diferentes dependencias municipales habrá una intensa capacitación para la toma de conciencia sobre la violencia de género o en contra de las mujeres.
A continuación el posicionamiento de Mirtha Villalvazo:
“Bahía de Banderas ha sido el escenario de consecuencias fatales de la violencia de género.
Hay un pesar colectivo social e institucional. Como alcaldesa, como ciudadana, pero sobre todo como madre de familia, repruebo estos lamentables hechos. He estado en contacto permanente con la Fiscalía del Estado de Nayarit para colaborar en lo que sea necesario, ahora que el Fiscal Petronilo Díaz Ponce anunció la captura de los presuntos responsables”.
Basta de feminicidios, clama la presidenta municipal, “basta de atentar contra la vida de las mujeres, basta de tocar a nuestras niñas. Haremos lo que esté a nuestro alcance y en el marco de nuestra competencia para estos fines.
El gobierno municipal desplegará políticas públicas que eliminen la violencia hacia las niñas y las mujeres, todo crimen de odio y las causas profundas del suicidio”, anunció.
“También he solicitado al DIF municipal un programa amplio de trabajo comunitario contra todo tipo de violencia.
Al interior del Ayuntamiento he pedido también a funcionarias y funcionarios aplicar toda clase de medidas para evitar cualquier tipo de acoso y violencia contra las mujeres. No toleraremos esa clase de conductas.
En el XI Ayuntamiento de Bahía de Banderas nos unimos a las quejas de la sociedad para que se aplique todo el peso de la ley en el castigo a los agresores. Nos comprometemos a trabajar en coordinación con el gobierno estatal y federal para construir una sociedad libre de violencia contra las niñas y mujeres”.
Hasta ahí el mensaje de la presidenta municipal.
Este indignante asesinato de las dos menores de edad de 11 y 14 años, motivó a Colectivos de Mujeres a organizar a una manifestación este sábado. La marcha dará inicio a las dos de la tarde en la gasolinera Las Ceibas, parta dirigirse a la Fiscalía de Nayarit, donde exigirán justicia.
EL DOBLE
FEMINICIDIO
El 26 de septiembre, el Agente del Ministerio Público adscrito a Valle de Banderas recibió la denuncia por desaparición de dos menores de edad de nombres Amelia y Verónica, de 11 y 14 años, respectivamente. La madre. María, dijo que desde el 23 de septiembre no sabía de sus hijas, ya que alrededor de las 18:00 horas salieron sin su autorización.
Al contactar a una de ellas vía telefónica, ésta le dijo que se encontraban en el poblado San Vicente con un hombre que les estaba invitando Sabritas. La madre volvió a llamar a su hija, pidiéndole que volvieran a su casa, pero la respuesta fue que volverían más tarde, lo cual no ocurrió.
El 25 de septiembre la Dirección de Seguridad Pública recibió reporte de que en el estero Coamile de la playa Careyeros, cerca del poblado Higuera Blanca, se encontraban dos cuerpos sin vida, al parecer de sexo femenino.
Ambos cuerpos presentaban ausencia de algunas extremidades y lesiones en rostro que no permitían su identificación, pues mostraban signos de ataque de cocodrilos, procediéndose a la realización de la necropsia de ley.
Mediante la autopsia se logró identificar en los cuerpos agresión física, ya que ambos presentaban signos de contusión activa en cráneo y asfixia mecánica, en tanto que el primero de los cadáveres además presentó una lesión punzante en cráneo, siendo precisamente ello la causa de la muerte.
A dichos cuerpos sin vida se les tomó la correspondiente muestra biológica para comparar su perfil genético con el de la señora María que buscaba a sus menores hijas, obteniéndose un resultado positivo; es decir, los cuerpos sin vida encontrados correspondían a las hijas de la señora María.
Ello permitió la acumulación de las tres carpetas de investigación, tanto la denuncia por desaparición como de los dos cuerpos encontrados sin vida, para obtener mayor información, toda vez que de la ampliación de entrevista tomada a la señora María, esta refirió sospechar de los ahora imputados César “N” y Catyan “N”, de 44 y 32 años de edad, respectivamente, quienes son esposos y vecinos de San Vicente, ya que existen antecedentes de amenazas que realizaron a la propia señora María, en el sentido de causarle daño a sus hijas.
Señaló la ofendida que desde un año atrás César salía con su hija Verónica, de 14 años, y que precisamente a principios de septiembre ambos imputados llegaron a su domicilio encontrándose ahí sus dos menores hijas y su esposo, a quien César dijo: “ya no aguanto a sus hijas, le mandan fotos a mi vieja; yo no me hago responsable si algo les pasa”.
Agregó que ese día sustrajeron del domicilio el teléfono de las menores víctimas y antes de retirarse la propia Catyan hizo la siguiente amenaza: “ya no aguanto a sus hijas, si les pasa algo, se desaparecen o si aparecen muertas, no hay manera de probar que fui yo; ya me tienen harta las dos, ya llegué a mi límite; si les pasa algo, no digas que no te advertí”.
Expresó la señora María que su hija Verónica le hizo saber que ya anteriormente había recibido este tipo de amenazas de parte de los imputados, y que además en otra ocasión César, con engaños, se la llevó a bordo de su vehículo en cuya parte posterior iba escondida Catyan, y que esta la amenazó con un cuchillo diciéndole que la mataría, golpeándola y tomando un galón de gasolina que arrojó a Verónica en sus piernas y partes íntimas, tomando un encendedor para prenderle fuego, siendo esto impedido por César.
En otra ocasión, los imputados acudieron de nuevo a la casa de las víctimas y sus padres, diciéndoles que se fueran de ahí, que los llevarían a la Central de autobuses para que se fueran a León, ya que Catyan no quería verlas; que ya no quería que molestaran a su esposo.
Comentó el Fiscal que el día de la desaparición de las menores víctimas, la madre de estas sorprendió a Amelia en medio de una videollamada con César, al cual identificó por la voz, quien la invitaba a que fuera adonde él se encontraba sin decir el lugar, y que llevara a su hermana Verónica. Momentos después las menores salieron de su domicilio, al cual ya no regresaron.