El gobierno de Jalisco incumplió su promesa de identificar e inhumar los cuerpos que permanecían en dos cajas refrigerantes y en las instalaciones delServicio Médico Forense (Semefo) del estado, tras la saturación de espacio.

Hasta la mañana de este lunes, día en que vence el plazo fijado por el gobernador Aristóteles SandovalDíaz, de los 444 cadáveres almacenados en los refrigeradores de la morgue y las dos cajas refrigerantes, solo habían logrado dar salida a 228 cuerpos, informó la Secretaría General de Gobierno al diario Reforma(solo suscriptores).

Del total, 189 cuerpos fueron inhumados y 39 entregados a sus familiares, reportó el diario.

El gobierno de Jalisco se comprometió a colocar los cuerpos en “un espacio digno”, además de comenzar la construcción de una cámara frigorífica y un espacio para cadáveres en descomposición con capacidad superior a los 300 cuerpos.

“Se ha fijado una meta, que para el 15 de octubre todos estos cuerpos no reclamados, que hoy se encuentran en contenedores refrigerantes, así como en las instalaciones del Servicio Médico Forense, sean colocados en espacios adecuados para que tengan un destino digno y apegado a los derechos humanos”, dijo Aristóteles Sandoval en conferencia de prensa el 19 de septiembre.

La crisis del estado

La violencia en el estado y la falta de capacidades institucionales provocaron que dos tráilers con cuerpos deambularan por varios municipios del estado.

“Nos ha superado la ola de violencia en todo el país y no es Jalisco la excepción”, dijo el gobernador cuando la noticia salió en prácticamente todos los medios. Aristóteles Sandoval despidió al fiscal del estado, Raúl Sánchez Jiménez, así como al jefe del servicio forense del estado, Luis Octavio Cotero.

En entrevista con el HuffPost, Cotero señaló que el gobernador del estado estaba enterado de las carencias en las instituciones. Especialistas también criticaron que no se tomaron las medidas necesarias para prevenir la situación y garantizar la entrega digna de los cuerpos a sus familiares.