En medio de la crisis sanitaria por la pandemia de Covid-19, especialistas en medicina de adicciones y organizaciones de salud reportan un peligroso aumento en el consumo y sobredosis por drogas opioides en Estados Unidos, territorio que actualmente es el principal mercado de sustancias ilegales, según los datos de la Universidad de Wales, Australia, y la Entrevista de Diagnóstico Compuesto Internacional (CIDI, por sus siglas en inglés) de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
La situación en el mercado de drogas en Estados Unidos, así como los hábitos de los consumidores, adaptados a las modas y producción experimental de sustancias ilegales en el mundo, entre los que figura un caso reciente con la droga fentanilo, opiáceo sintético cien veces más potente que la morfina, ha generado un aumento de 15% en las muertes por sobredosis durante el primer semestre de 2020, según indicaron los centros de control de enfermedades y la Sociedad Americana de Medicina de Adicción (ASAM, por sus siglas en inglés).
De acuerdo con Shawn A. Ryan, director de asuntos legislativos en ASAM, quien ha trabajado directamente en las zonas de mayor incidencia en problemas de salud derivados de la crisis por opioides en Estados Unidos, Ohio y Kentucky, los detonantes habituales de adicciones se incrementaron con el aislamiento social y la crisis sanitaria por Covid-19 en el territorio estadounidense.
Los detonantes se dividen en: separación y aislamiento de otras personas, problemas económicos, desempleo, dificultades de transporte en las ciudades, poca accesibilidad de la información y falta apoyo respecto a los temas de salud mental y autocuidado entre la población.
Sin embargo, el factor más importante que contribuye a este repunte en los casos de consumo y sobredosis de opioides en Estados Unidos, es la mezcla de adulterantes de origen sintético en el suministro habitual de drogas, reportó Shawn A. Ryan.
Entre los adulterantes más lucrativos y empleados, además del fentanilo, se encuentra el carfentanilo, mezcla de opioides utilizados en tranquilizantes para elefantes y otros mamíferos de gran tamaño, hasta 100 veces más potente que el fentanilo. Según los datos recopilados por ASAM, con base en los hábitos de consumo de Ohio, la mezcla de heroína con carfentanilo puede matar hasta 174 personas en seis días.
Asimismo, según un estudio publicado por la farmacéuticas IronWood y Pfizer, la Constipación Inducida por Opioides (OIC, por sus siglas en inglés) espera un aumento de casos entre 2020 y 2025. Esto de debe tanto a la presencia de opioides en medicamentos regulados, como en consumo relacionado con el repunte de las adicciones por su comercio ilegal.
Frente a este escenario, donde Estados Unidos sufre hasta 15% más de muertes por sobredosis, el problema del mercado de drogas y los hábitos de consumo representan una epidemia de opioides y otras substancias ilegales. Por este motivo, las autoridades sanitarias, así como el gobierno del presidente Donald Trump, deben responder en consecuencia con las necesidades de su población y la salud pública, según especialistas de ASAM.