La Unión Europea abrió el 15 de junio sus fronteras después de tres meses de cierres por la pandemia de Covid-19 iniciados en marzo de 2020 por la rápida propagación del virus alrededor del territorio europeo. En este sentido, los controles de frontera para la mayoría de los europeos se retiraron en Alemania y Francia, después de la apertura de Italia hace casi dos semanas.
Asimismo, no todos los miembros de la Unión Europea y de la zona Schengen se abrirán a visitantes extranjeros hasta al menos principios de julio. Emmanuel Macron, presidente de Francia anunció la reapertura de sus fronteras y restaurantes en la ciudad de París, “es hora de pasar página del primer acto de la crisis y redescubrir nuestro gusto por la libertad”; igualmente, advirtió, “esto no significa que el virus haya desaparecido y podamos bajar la guardia por completo, el verano de 2020 será uno como ningún otro”.
Según los datos del conteo de la Universidad Johns Hopkins, el continente europeo ya ha registrado más de dos millones de casos positivos y ha ocasionado más de 182 mil muertes alrededor del territorio. De esta manera, entre la población europea aún hay cautela para realizar viajes dentro del continente.
Pedro Sánchez, presidente de España informó el 14 de junio, el país adelantará 10 días la apertura a viajes europeos, es decir al 21 de junio. “El turismo es un sector clave para la recuperación de la economía”, señaló el presidente, “el virus todavía no ha desaparecido, sigue al acecho”, pero para España ya es necesario poner en marcha la industria turística debido a los efectos económicos que acontecían desde antes de la pandemia, y se empeoraron a consecuencia de ella.
El primer ministro de Grecia, Kyriakos Mitsotakis también reconoció la necesidad de su país de reactivar el turismo y mencionó, “todo dependerá de si la gente se siente cómoda para viajar y si podemos presentar Grecia como un destino seguro”.
Aunque algunos países de Europa iniciaron la recuperación del turismo mediante el retiro de controles, varios países no han abierto sus fronteras, por ejemplo, Noruega y Dinamarca mantuvieron cerradas las fronteras con Suecia, país que optó por un manejo con cuarentena y registró niveles de mortalidad relativamente altos.