Durante las próximas semanas, las empresas tendrán una verdadera prueba de agilidad, adaptabilidad y perseverancia, pues tendrán que visualizar la transición hacia la “nueva normalidad”. Debido a esto, la transformación digital continuará en la nueva normalidad en el ámbito empresarial, aseguran diversos expertos como Fernando Maroniene, vicepresidente de marketing en Ricoh Latinoamérica.

Se espera que las compras online continúen e, incluso, suban considerablemente en la nueva normalidad. Un estudio hecho por la Corporación Internacional de Datos en Latinoamérica, muestra que el 53% de las compañías se está enfocando en crear modelos de trabajo remoto y dinámico para responder a este escenario. Es una solución lógica con el fin de evitar viajes y movilidad no esencial, además muestra el compromiso de las compañías por seguir invirtiendo en la salud y seguridad de sus empleados.

Los sistemas y las tecnologías de la comunicación serán indispensables en la nueva normalidad para que el capital humano pueda seguir siendo productivo de la forma más segura posible, en la oficina o remotamente. Esto cumplirá los objetivos empresariales evitando contagios, reduciendo el contacto físico entre personas y la aglomeración de gente en un espacio, a medida que aumentan las ventas por en internet.

No obstante, por otro lado, en la nueva normalidad, la eficiencia será otro factor fundamental. Es importante que la fuerza laboral se pueda centrar en planear y ejecutar las actividades que más valor aporten a la compañía. Para lograrlo, las empresas deberán valorar y confiar en la automatización para ejecutar las tareas repetitivas.

Las expectativas de los empleados, clientes, proveedores y toda la cadena de valor han evolucionado debido a la contingencia mundial. Las compañías en América Latina están viendo y viviendo que lo que funcionaba en el pasado, puede ser hoy, y probablemente en el futuro, ineficaz y no brindar los mismos resultados; el ámbito empresarial está avanzando hacia formas de operar más ágiles.

Esta situación de hoy ha obligado a las empresas a acelerar su enfoque, empujando mucho más allá de la zona de confort. En este ambiente, es todavía mucho más difícil predecir ciertas situaciones en el ámbito empresarial. Según datos de Forbes, se espera, el nuevo cliente sea mucho más digital, más consciente y ahorrativo. Los días en que los clientes tenían la paciencia de esperar 48 horas para recibir un correo electrónico de devolución o un día entero para que se respondiera su publicación en alguna red social han llegado a su fin.

Muchas personas actualmente compran bienes y servicios en línea como nunca, y la expectativa ahora es que las marcas sean ágiles, personalizadas y que operen en un contexto social. Por ello las empresas deben investigar y probar nuevas formas de trabajo, nuevas soluciones o incluso una nueva infraestructura, para estar un paso adelante, asegura Fernando Maroniene, para responder a este nuevo escenario.

De esta forma, resulta fundamental conocer al nuevo cliente, quien busca darle continuidad a su negocio ante la adversidad, y proveer herramientas a sus colaboradores para que puedan continuar trabajando y siendo eficientes desde cualquier parte.

Indudablemente hay un camino difícil por delante, lleno de retos y desafíos, pero también de oportunidades para adaptarse a la nueva normalidad empresarial. Cada negocio y sector debe analizar sus múltiples variantes para alcanzar la mejor manera de adaptarse a este nuevo mundo.No obstante, algo seguro es que la transformación digital seguirá desarrollándose y aplicándose en la nueva normalidad en el ámbito empresarial, aseguran expertos y lo reafirman las estrategias de las empresas.