México.- El rey David era un hombre muy anciano a quien las frazadas le eran insuficientes para entrar en calor. Por ello, sus consejeros dijeron: “busquemos una joven virgen que lo atienda y lo cuide”. Con este pasaje bíblico comenzaban las historias de abuso sexual cometidas por Naasón Joaquín García, líder de la iglesia La Luz del Mundo.
Así lo relató este año a medios de comunicación Sochil Martin, una joven de ahora 33 años de edad, quien se convirtió en la primera víctima en alzar la voz y denunciar ante la justicia estadounidense a Joaquín García, el hombre que utilizó la Biblia en sus versículos uno y dos del Libro Primero de los Reyes para aprovecharse de ella.
Naasón Joaquín García, su agresor, se convirtió desde 2014 en el presidente de La Luz del Mundo a nivel internacional, una de las iglesias evangélicas con mayor presencia en México, pero también con un importante número de adeptos en más de 60 países.
De apóstol a líder de La Luz del Mundo
La cadena de noticias BBC News comenta que Joaquín García mantuvo un perfil bajo durante mucho tiempo a pesar de ser el hijo de Samuel Joaquín Flores, dirigente de La Luz del Mundo durante 50 años. Naasón inició su trabajo como misionero a los 14 años en los barrios de Guadalajara, Jalisco, donde también se ubica la sede principal.
Tras la muerte de su padre ascendió a líder de la iglesia y se convirtió en una figura pública. No obstante, es difícil dibujar desde qué etapa de su vida comenzó a ser cómplice de la red de tráfico de personas, extorsión y abuso sexual de la que Martin y miles de hombres y mujeres más fueron víctimas.
Al asumir el liderazgo, Naasón siguió lo que Sochil Martin describió en sus declaraciones como una tradición familiar, donde no sólo el hombre actualmente en prisión, sino también su padre y su abuelo Aarón, fundador del culto, hablaban de “la voluntad de Dios” para apropiarse de lo que no les pertenecía, incluyendo la infancia de cientos o miles de personas.
“Son cientos (de víctimas) y si estamos hablando del tiempo de Aarón son miles”, dijo la denunciante en febrero de este año con lágrimas en sus ojos y la voz al borde del quiebre. En ese momento, la Fiscalía de California escuchó atentamente su testimonio y lo añadió a la carpeta de investigación contra el líder, detenido en junio de 2019.
El juicio del “rey David”
Naasón García fue detenido en Los Ángeles, California, el 4 de junio de 2019, ocho meses antes de que Martin esclareciera la historia. En ese momento, la Fiscalía del estado inició un proceso con 26 cargos en contra del líder religioso por pornografía infantil, abuso sexual contra menores y trata de personas. Delitos que su comunidad rechazó tajantemente.
Al inicio, el arresto tuvo sustento en la denuncia de presuntas víctimas, quienes afirmaron ante la justicia estadounidense que las obligaron a desnudarse y realizar actos sexuales ante una cámara. A partir de ello, comenzaron las investigaciones por agresión sexual a cuatro mujeres, entre ellas tres adolescentes, y por dos casos de violación. Esto, ocurrido entre 2015 y 2018.
Así comenzó el juicio de quien, según narró Sochil Martin, se hacía pasar por el rey David para elegir a jóvenes de las comunidades de creyentes a quienes convertían en sus “doncellas”, en la mayoría de los casos, con un discurso que convencía a los familiares de las víctimas sobre la “misión especial” de las jóvenes.
La joven denunció que su familia y su comunidad también le hicieron creer que la salvación de su alma dependía de servir sexualmente a los líderes de la organización. “Mi cuerpo, mi mente y mi alma pertenecían a La Luz del Mundo”, comentó Martin.
El líder de La Luz del Mundo ha permanecido en prisión sin sentencia en medio de un proceso que se debate entre la justicia y la impunidad. Varias audiencias han transcurrido desde su detención en la Corte Superior de Los Ángeles, con nuevos testimonios e historias perturbadoras de por medio.
Distintas apelaciones fueron rechazadas en el proceso. Primero, sus abogados fracasaron al intentar la salida de Naasón bajo fianza. Luego, el 26 de septiembre de 2019, un juez rechazó una moción para desestimar el caso por presuntas irregularidades que sus abogados argumentaron.
La misma respuesta se obtuvo tras otra apelación rechazada el 22 de octubre de ese mismo año y una más del 26 de diciembre quedó desechada a pesar de los múltiples esfuerzos de la defensa del líder de La Luz del Mundo por desestimar el caso, según recapitula el medio Univisión.
Desde inicios de 2020, la batalla por liberar al “rey David” o dictarle sentencia continuó ente la Fiscalía y la defensa, con las víctimas de por medio. Durante febrero Sochil Martin alzó la voz y en marzo fueron congeladas distintas cuentas pertenecientes a La Luz del Mundo por presuntas operaciones ilícitas.
Un desenlace que podría resultar escalofriante
La batalla legal se ha centrado, por un lado, en apelar a irregularidades procesales para lograr la libertad del dirigente evangélico y, por otro, en hacer públicos los abusos cometidos por quien incluso poseía más de 100 mil fotografías y mil videos con contenido sexual en su teléfono celular al momento de su detención, de acuerdo con la Fiscalía estatal.
En medio de esta pelea se encuentra la justicia y la atención a las víctimas de una iglesia cuyos líderes podrían haber cometido abusos desde la fundación de la misma en 1926, de acuerdo con lo relatado por la denunciante. No obstante, Naasón García aún no cuenta con una sentencia y la pandemia de coronavirus (COVID-19) podría retrasar el proceso aún más.
Por ahora, la última certeza es el fallo de la corte de apelaciones del Segundo Distrito de Los Ángeles, instancia que ordenó el pasado 8 de abril desestimar los cargos que se le imputaron al religioso por errores en el procedimiento llevado por la corte superior de la entidad.
La apelación de la defensa tenía bajo argumento la existencia de diversas audiencias extemporáneas y el hecho de que la justicia de Los Ángeles no cumplió con ofrecerle un juicio expedito dentro de los primeros días en que se le agregaron nuevos cargos penales.
En este punto, expertos comentaron a Univisión que haber desechado el caso no implica la libertad inmediata del acusado. Aún falta la entrada en vigor del fallo, cuya fecha dependerá del fin de la contingencia por COVID-19 en Estados Unidos. Después de ello, la Fiscalía de California podría iniciar el proceso nuevamente y, probablemente, de forma debida.
“Lo que nos pasó no es una bendición, no proviene de la voluntad de Dios y no está bien”, dijo Sochil Martin en sus declaraciones, que fueron rechazadas por La Luz del Mundo. Mientras tanto, la “voluntad de Dios” y la justicia estadounidense se disputan la atención a las víctimas y el futuro de quien fingió ser un rey.