Las autoridades italianas informaron este viernes que el número de muertes en el país continúa disminuyendo, pues en las últimas 24 horas solo se registraron 570, las que constituyen “la menor tasa de crecimiento (3,1 por ciento) registrada”.
El jefe de Protección Civil de Italia, Angelo Borrelli, detalló que en el país se han curado de la infección por COVID-19 un total de 30 mil 455 personas, y destacó que durante el último día fueron dados de alta dos mil pacientes, “cifra similar a la de los últimos tres días”.
Asimismo, destacó que el número de pacientes que ingresan al área de cuidados intensivos disminuye desde hace cuatro días. Durante las últimas 24 horas se registró una disminución de 157 ingresos, además de que “la liberación de camas se vuelve sistemática, al menos 100 por día”, y la cifra de pacientes que superaron el pronóstico reservado fue de 108.
Sin embargo, dijo que el número de contagios sigue aumentado. Tan sólo en el último día se confirmaron tres mil 951 (aunque fueron 253 menos que ayer). Al respecto, Silvio Brusaferro, presidente del Instituto Superior de Salud, dijo que “claramente se ve que la curva está en declive, pero no se puede bajar la guardia”.
“Las señales positivas no deben dejarnos bajar la guardia. Las acciones tomadas son importantes, pero no debemos engañarnos a nosotros mismos de que la situación está resuelta. Las medidas son esenciales para mantener la curva”, agregó Brusaferro en conferencia de prensa.
El primer ministro Giuseppe Conte dijo que las medidas restrictivas se extenderán hasta el 3 de mayo, considerando para entonces algunas reaperturas de negocios como librerías, papelerías y tiendas de ropa para niños. Puntualizó que “la esperanza es que después de ese día se pueda volver a comenzar con precaución y de forma gradual”.
De acuerdo con datos de la Organización Mundial de la Salud, Italia registra un total de 147 mil 577 casos confirmados de la nueva cepa de coronavirus y un total de 18 mil 849 defunciones.