Tepic.- Más de cincuenta personas mayores en Tepic se niegan a permanecer en sus casas, ante la prohibición de ingresar a la plaza principal, ahora éstos se refugian en el andador que se ubica a un costado de la presidencia de esta municipalidad, reveló Liliana Hernández Jacobo, coordinadora de Salud Pública del Ayuntamiento de Tepic.

“Comentarles que sí se ha tenido mucha renuencia, inclusive hay personas que se tornan un poquito agresivas, se les piden sus domicilios, nadie se sabe el domicilio, nadie tiene familiares, entonces sí es un poquito difícil hacerlos conscientes, sobre todo aunque les digamos que son una población de riesgo que tienen mayores probabilidades de complicarse en caso de enfermarse, pero ni aun así lo toma en cuenta”.

Hernández Jacobo explicó que de manera general sí han disminuido la presencia de abuelitos en los andadores de la plaza principal en comparación a lo habitual: “sí hemos estado dando rondines, ha disminuido mucho, pero créeme que realmente vemos muchas caras conocidas de las que inicialmente se les dio la información y de todas maneras se están ahí.

“Desafortunadamente, la mayoría no tenía número de teléfono y quienes lo proporcionaban era un número personal, entonces sí es un poquito difícil hacer conciencia sobre ese tema, aunque hemos estado tratando en las oportunidades de entrevistas darles inclusive el presidente municipal, de darles la información a los familiares, porque yo creo que como familiares si estamos conscientes que papá, abuelito de nosotros, se viene aquí a la plaza para que ellos los puedan un poquito restringirles la salida, porque al final de cuentas ellos son los únicos responsables o los que pueden tener más tacto o más contacto con ellos para poderles hacer conciencia”.

– ¿Y qué se hará con los abuelitos que no quieren irse a su casa?

– Por lo pronto, son puras medidas preventivas, yo creo que en el transcurso de la evolución de la enfermedad pues veremos si ya se toman algunas otra medidas, de hecho sí se tiene contemplado en cierto momento localizar a algún familiar y hacer responsables al familiar, porque sabemos que los adultos mayores conforme pasa el tiempo empieza a tener un carácter más fuerte, como les digo, ha llegado o hemos tenido malas repuestas por parte de ellos, son muy renuentes.

– ¿Se podría usar la fuerza pública, para que los abuelitos se vayan a sus casas?

– Probablemente como fuerza pública como tal, no, pero a lo mejor sí hacernos como que la misma patrulla los lleve a su casa, de manera voluntaria, apuntó.