Estados Unidos expulsó hoy a dos miembros de una misión diplomática de Cuba ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU) bajo el argumento de que se “involucraron en actividades que dañan la seguridad nacional estadunidense“.
La vocera del Departamento de Estado, Morgan Ortagus, dijo en un mensaje de Twitter que el gobierno le pidió a dos integrantes de la misión cubana en la ONU que se fueran de Estados Unidos por haberse involucrado en actividades dañinas para la seguridad nacional estadunidense.
Los integrantes de la misión de Cuba también tienen restringida su estancia a Manhattan (Nueva York). Tomamos en serio todos y cada uno de los intentos contra la Seguridad Nacional de Estados Unidos, subrayó Ortagus, sin más información, reportó el portal de noticias Infobae.
Por el momento, los diplomáticos cubanos en Estados Unidos y los estadunidenses en La Habana tienen restringidos los movimientos y solo tienen capacidad para desplazarse por una determinada zona, aunque sí pueden solicitar una autorización para viajar a otra parte del país.
Cuba suele usar la plataforma de la ONU para pedir el fin del embargo comercial y económico sobre la isla. Desde 1992, cada año, la Asamblea General de las Naciones Unidas aprueba un texto que no tiene carácter vinculante, pero en el que se insta a Washington a acabar con el bloqueo y se resaltan sus efectos negativos.
La expulsión de los diplomáticos cubanos se da en el marco de la Asamblea General de la ONU, que reúne a jefes de Estado y cancilleres de todo el mundo.
Además, sucede en un momento en el que Washington ha presionado a Cuba con nuevas sanciones comerciales. A principios de junio, la administración estadunidense aprobó nuevas restricciones contra La Habana, prohibiendo los viajes grupales educativos a la isla y cancelando las autorizaciones para barcos de recreo y de pasajeros.
Tras el apoyo de La Habana a Caracas, Washington aumentó la presión comercial sobre Cuba, limitando las remesas al país caribeño a mil dólares estadunidenses por trimestre y restringiendo las transacciones bancarias.
El Gobierno cubano también denunció que Washington presionó económicamente a la isla y provocó la escasez de combustible.
El canciller cubano Bruno Rodríguez Parrilla tuiteo en su cuenta que el bloqueo orquestado por Washington es “ilegal, criminal y genocida”, y alertó que constituye “una violación masiva, flagrante y sistemática” de los derechos humanos de los cubanos.