El secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), António Guterres, resaltó este lunes el papel de la mujer en el fortalecimiento de asistencia humanitaria y apoyo que brindan a diario a millones de personas vulnerables en el mundo, atrapadas en medio de conflictos.
En el marco del Día Mundial de la Asistencia Humanitaria, que desde hace 10 años se celebra cada 19 de Agosto, Guterres elogió el esfuerzo de las trabajadoras humanitarias que llevan ayuda a millones de mujeres, hombres y niños con necesidades urgentes en todo el mundo.
“Este día honramos el trabajo de las mujeres que luchan en zonas de conflicto alrededor del mundo. Aquellas heroínas anónimas que trabajan al frente de sus comunidades en los terrenos más difíciles: desde las heridas de guerra en Afganistán, hasta la inseguridad alimentaria en el Sahel, República Centroafricana, Sudán del Sur, Siria y Yemen”, indicó.
El jefe de la ONU destacó que las mujeres conforman un gran número de aquellos que arriesgan sus propias vidas para salvar a otros. “A menudo son las primeras en responder y las últimas en irse. Estas mujeres merecen un reconocimiento”, apuntó.
Hoy más que nunca, agregó, se necesitan fortalecer para la respuesta humanitaria mundial. Y los líderes mundiales, así como los actores no estatales, deben garantizar que ellas, y todo el personal de asistencia humanitaria, tengan garantizada la protección que les otorga el derecho internacional.
“El trabajo de las mujeres humanitarias marca una ‘gran diferencia’ en la vida de millones de mujeres, hombres y niños con necesidades urgentes”, subrayó Guterres en su mensaje publicado en la página Web del organismo internacional.
Destacó que la presencia de trabajadoras humanitarias hace que las operaciones de ayuda sean más efectivas, además de que mejora la respuesta humanitaria a la violencia de género, que suele aumentar durante las emergencias.
En todo el mundo, 250 mil trabajadores humanitarios son mujeres, una cifra que representa más del 40 por ciento de la fuerza laboral humanitaria, pese a que su trabajo de ayuda se está volviendo cada vez más peligroso y ha cobrado muchas vidas.
De acuerdo con datos de la ONU, más de cuatro mil 500 trabajadores humanitarios de todos los géneros han sido asesinados, heridos, detenidos, agredidos o secuestrados mientras realizaban su trabajo desde agosto de 2003, un promedia cinco ataques por semana.
Además, las mujeres humanitarias corren un riesgo particularmente alto de robo, agresión sexual y otros actos de violencia, indicó el jefe de las Naciones Unidas, enfatizando que el derecho internacional, todos los trabajadores humanitarios deben ser salvaguardados.
“Los líderes mundiales, y todas las partes en conflicto, deben garantizar que los trabajadores humanitarios estén protegidos contra daños, como lo exige el derecho internacional. Las violaciones graves del derecho internacional humanitario deben investigarse y procesarse siempre“, agregó Guterres.
En el marco del décimo aniversario oficial del Día Mundial de la Asistencia Humanitaria, la ONU recordó que justo en esta fecha, en 2003, su sede en Bagdad fue atacada por un gran camión-bomba, que causó la muerte de 22 personas, incluido Sergio Vieira de Mello, su máximo representante en Irak.