Los ministros de Educación del Grupo de los Siete (G7) países más industrializados anunciaron esta tarde una coalición con la Unesco para combatir el acoso escolar, un fenómeno que afecta a nivel global.
Anunciaron además la realización de una conferencia internacional en París en el 2020 para aclarar aún más el tema y buscar mecanismos para garantizar una educación segura para todos.
Los acuerdos se tomaron en el marco del encuentro de ministros de Educación y Desarrollo que se realiza en esta capital preparatorio a la Cumbre del G7, que se llevará a cabo en Biarritz, Francia, el 26 de agosto próximo.
En la cita, la primera dama de Francia, Brigitte Macron, pronunció un discuso sobre el acoso escolar, en el que señaló que “nuestro primer enemigo es el silencio“, de acuerdo con un mensaje del Ministerio de Educación de Francia en su cuenta de la red social Twitter.
Al término del encuentro, la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) llamó a la comunidad internacional a redoblar esfuerzos para manejar la creciente violencia en las escuelas y poner fin al acoso.
La directora de Unesco, Audrey Azoulay, calificó el bulling como “un flagelo que socava la educación, estropea vidas, arruina infancias y compromete el futuro. El acoso en las escuelas es inaceptable”.
“Tenemos datos sólidos y directrices prácticas. Ahora necesitamos intensificar nuestros esfuerzos con todos los Estados miembros, incluyendo al G7, para abordar el acoso“, afirmó.
Como parte del trabajo para garantizar la seguridad de los niños en las escuelas, Unesco dijo que ha desarrollado un indicador armonizado encaminado a evaluar la situación en cada país, a fin de contribuir al fortalecimiento de la legislación, la capacitación de maestros y al combate de la violencia escolar.
De acuerdo con el informe más reciente de la Unesco, con sede en París, 32 por ciento de los estudiantes del mundo son acosados por sus compañeros de clase al menos una vez al mes.
Los ministros de Educación del G7 se reunieron además con sus colegas de Argentina, Estonia y Singapur -países no miembros- para conocer su experiencia en la innovación pedagógica que promueva la educación de la infancia.
En el marco del encuentro, Argentina y Francia firmaron importantes acuerdos de cooperación en formación docente y en energías renovables.
Argentina participó en el encuentro de dos días debido “a sus planes en alfabetización digital y la incorporación de la programación y la robótica en la curricula escolar”.
El ministro argentino de Educación, Alejandro Finocchiaro, y su colega francés Jean Michel Blanquer, firmaron acuerdos sobre formación docente, transferencia de conocimiento en energía, objetivos de sustentabilidad y trabajos sobre créditos universitarios con Francia.
Finocchiaro señalo que estos acuerdos “revelan años de trabajo” conjunto con el país europeo.
De manera paralela, se llevó cabo el encuentro de los ministros de Desarrollo del G-7 con sus colegas del G5 Sahel, un grupo integrado por Mali, Níger, Mauritania, Burkina Faso y Chad, cuyo objetivo es combatir el terrorismo en la región y promover el crecimiento económico y social.
El canciller francés Jean-Yves Le Drian, quien presidió la reunión, indicó que el G7 tiene intención de centrar su ayuda al desarrollo en los países y las regiones más frágiles y que acumulan las mayores bolsas de pobreza, como el Sahel.