El presidente del Consejo Mexicano de Agrobiotecnología (Comabio), Marcel Morales Ibarra, aseguró que México necesita dar un giro de 180 grados en la producción de fertilizantes en lugar de privilegiar productos químicos, que este año tendrán 12 mil millones de pesos del Presupuesto de Egresos de la Federación 2019.
“Es urgente y necesario que el gobierno de la Cuarta Transformación construya las bases para cambiar hacia una agricultura ecológica”.
Ello porque los fertilizantes químicos tienen altos costos ambientales y económicos, aunado a los casos de presunta corrupción en Petróleos Mexicanos (Pemex) y las pérdidas millonarias para el erario público al adquirir plantas en mal estado.
Contrario a ello, Morales Ibarra recordó que los biofertilizantes representan apenas 10 por ciento del costo que tienen los fertilizantes químicos que son traídos de lugares tan lejanos como Ucrania o China, es decir, “estamos importando contaminación para los campos agrícolas de México”.
Pero lo paradójico es que la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader), a cargo de Víctor Villalobos Arámbula, sólo destinará 100 millones de pesos para biofertilizantes, refirió Morales Ibarra.
El especialista consideró que seguir con insumos químicos es una apuesta por la ineficiencia y va en detrimento del medio ambiente, de ahí la necesidad de insistir en tener alternativas amigables con el medio ambiente.
Entre ellas se encuentran el uso de bioinsumos generados a partir de la investigación en instituciones de alto prestigio, como la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Instituto Politécnico Nacional, el Laboratorio Nacional de Genómica para la Biodiversidad (Langebio) y el Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (Inifap), porque han demostrado ser más eficientes y económicas para los productores, apuntó.