La seguridad cibernética es un factor crítico para el éxito de los negocios y se requiere más profesionales especializados en esta labor. Las cifras apuntan a que en los próximos cinco años las ofertas de trabajo se triplicarán, requiriéndose a más de 3 millones de ingenieros con destrezas en ciberseguridad, de acuerdo con datos de la consultora Cybersecurity Ventures.
En el panel ‘Ciberseguridad y Talento’, organizado por la firma Data Warden, en el marco del Premio Internacional Bachillerato (PIBA) de la Universidad Anáhuac Querétaro, especialistas afirmaron que las instituciones, empresas y gobiernos a nivel global enfrentan un número cada vez mayor de ciberataques, pero la cantidad de profesionales para prevenir estos escenarios es insuficiente.
“Encontrar un perfil especializado en prevenir y responder incidentes de seguridad hoy tiene un alto grado de dificultad, aun cuando es un campo con muchas oportunidades para jóvenes que se preparen en crear estrategias de prevención”, indicó Octavio Escalante, consultor en ciberseguridad en Data Warden.
Roberto Trejo, coordinador del programa de Ingeniería en Informática y Negocios Digitales de la Universidad Anáhuac Querétaro, señaló que en México se debe trabajar con “mayor rapidez” en la formación de profesionales para esta industria. Pero para lograr ese objetivo ‘urge’ un cambio cultural.
“Aún pensamos que en nuestras empresas y hogares no habrá un ataque cibernético. La seguridad informática implica responsabilidad; entender las pérdidas que implica no prepararse y tener al talento listo para crear estrategias de prevención”, dijo el académico.
Durante el panel, que reunió a académicos, alumnos y especialistas, se concluyó que los ingenieros en formación requieren “mayor conciencia” sobre las oportunidades que arroja la industria de seguridad informática y las destrezas técnicas y sociales más demandadas.
“Los ingenieros necesitan, por ejemplo, habilidad para integrarse en equipos, comunicar, resolver problemáticas en cada una de las áreas asociadas al proceso de proteger información. Desde cómo se genera una estrategia, se implementa, y da seguimiento, hasta cómo actúa en caso de un hackeo y capacitar al usuario final, que es el eslabón más débil en una cadena de ataques”, precisó Oscar García García, IT Manager de la Universidad Anáhuac.
Octavio Escalante puntualizó que México no lleva la batuta en formación y especialización de talento en seguridad de información. “Pero eso es a lo que se debe aspirar” -añadió- si se considera el tipo de vulnerabilidad en la que se encuentran los mercados, respecto a protección de datos, y la sofisticación que existe en el tipo de ataques.