Los tres hermanos sinaloenses presos por 11 años en Malasia, acusados por el delito de narcotráfico, regresaron a Culiacán, precisamente el Día de las Madres y se reunieron con sus familiares, luego de que les otorgaran el perdón y con ello libraron la horca.
Se trata de los hermanos Luis Alfonso, José Regino y Simón González Villarreal, quienes arribaron al aeropuerto de Culiacán y se reencontraron con sus familiares, tras casi 11 años de reclusión.
Los hermanos González Villarreal fueron detenidos el 4 de marzo del 2008 dentro de una fábrica en el parque industrial de Senai, acusados por las autoridades de Malasia de operar un laboratorio clandestino.
Luis, José y Simón fueron presentados por la justicia Malasia con los cargos de narcotráfico, un delito grave en aquel país asiático y se encontraron en posesión de 29 mil 460 kilogramos de metanfetaminas.
Los hermanos González Villarreal fueron sentenciados a morir en la horca, sin embargo la ejecución se aplazó, luego de que los mexicanos argumentaron que su juicio fue llevado en el idioma malayo y sin traductores.
Apenas el año pasado, la sentencia contra los hermanos sinaloenses fue modificada y pasó de morir en la horca a cadena perpetua.
Fue el sultán de Malasia quien le otorgó el perdón a los mexicanos, por lo que la Secretaría de Relaciones Exteriores de México vio con beneplácito la liberación de los hermanos González Villarreal.