La ministra argentina de Seguridad, Patricia Bullrich, anunció hoy que durante la jornada de paro nacional convocada por sindicatos y organizaciones sociales para mañana martes, “va a haber fuerzas de seguridad por todos lados”.
“Aquellos que llaman al paro por el trabajo lo que hacen es destruir el trabajo. Este es el verdadero riesgo país, esto es en contra de lo que nosotros peleamos”, dijo Bullrich desde la presidencial Casa Rosada, en referencia al aumento del riesgo país de Argentina, que la semana pasada rebasó los mil puntos.
La ministra denunció la quema de cuatro vehículos colectivos y acusó a los promotores del paro, convocado por el Frente Sindical para el Modelo Nacional (FSMN), las dos Centrales de Trabajadores de Argentina (CTA) y el Sindicalismo Combativo, a los que calificó de “mafias” y “patotas” o pandillas.
“Ya estamos viendo, y yo ya lo advertí, actitudes mafiosas. Las mafias están actuando”, reiteró en referencia a las “patotas” que quemaron las unidades en vísperas del paro de 24 horas, uno de cuyos principales componentes será la suspensión de servicios de transporte.
Las fuerzas de seguridad “ya están yendo a las terminales y cabeceras” de las empresas de transporte para evitar que estos hechos de violencia se repitan, remarcó Bullirch, quien fustigó a “aquellos que queman colectivos porque no aceptan que haya gente que quiera trabajar”.
La funcionaria anunció la conformación de un comando de control especial “para garantizar la seguridad durante la protesta”, y reiteró que “vamos a ir muy fuerte. Mañana va a haber fuerzas de seguridad por todos lados y en todas las cabeceras”.
La ministra ratificó que no se permitirán cortes de calles o rutas, y sostuvo que los ataques a los medios de transporte son “episodios cuasi terroristas” que constituyen “el verdadero riesgo país”, informó la agencia de noticias Télam.
Cuando la prensa le pidió identificar a las “mafias” de las que hablaba, señaló que se refería a “las mafias que han organizando esta acción para mañana están actuando, están quemando capital, impidiendo que los colectiveros que quizás compraron con gran esfuerzo este colectivo, lo puedan manejar”.
