Después de más de cuatro lustros sin que operara en su totalidad, la Comisión Estatal del Agua (CEA) puso a funcionar al cien por ciento la planta de tratamiento de aguas residuales de Sayulita, municipio de Bahía de Banderas, a la que se le agregó un emisor submarino que favorece el proceso de saneamiento.
En rueda de prensa, la titular de CEA, Martha Patricia Urenda Delgado, informó que desde hace un año inició el proyecto de modernización de esas instalaciones para contribuir en mayor medida al tratamiento de las aguas negras en la zona y dar una solución definitiva al problema de contaminación, es decir, “sin mejoralitos”, subrayó.
Acompañada del Secretario de Salud, Raúl Santiago López Díaz, y del titular en Nayarit de la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA), Salvador Amaral López, así como del jefe del Departamento de Educación Ambiental y Playas Limpias de la Secretaría de Desarrollo Rural y Medio Ambiente (SEDERMA), Arturo Flores, la funcionaria refirió que hace aproximadamente siete meses comenzó los trabajos en la planta y hoy ya se encuentra en operación, con una vida útil de más de 60 años, siempre y cuando se le dé el mantenimiento adecuado.
“Sayulita tenía una problemática que data de más de veinte años; antes no había una planta de tratamiento, después se hizo una planta de tratamiento que nunca operó de manera adecuada, llegamos con esta administración y nos dimos cuenta del problema tan fuerte, y nos dimos a la tarea de preparar el proyecto. Todo se da de manera muy coordinada con la CONAGUA, hacemos todo el proyecto y así se hacen todos los trámites ante las instancias adecuadas, como es la CONAGUA, SEMARNAT y la Secretaría de Marina”, explicó la Directora de CEA.
“A través de sistemas de vortex, sistemas de pre-tratamientos y tratamientos, la planta está operando de manera óptima; aunado a esto, también se hizo un emisor submarino. El trabajo está completamente terminado; no obstante que la fecha de conclusión de la obra era el 15 de mayo, nos pusimos como meta antes de Semana Santa y se ha logrado, ya no se está vertiendo absolutamente nada de agua, aunque fuera tratada, al mar”, añadió Urenda Delgado.
Precisó que para poder llevar a cabo los trabajos, la Federación y el Estado aplicaron una inversión de 41 mdp, y actualmente sólo se realizan labores de limpieza fina, así que quienes visiten el destino podrán dar cuenta de la erradicación de los olores fétidos que se propagaban. “Quienes han estado al pendiente de esto saben que es un problema que venía desde hace mucho tiempo, se terminó la planta y ya no hay olores fétidos, ni está escurriendo el agua a la playa”, detalló la funcionaria.
Indicó que con esta renovación, la planta de tratamiento cubrirá las necesidades de los habitantes del lugar y de la población flotante durante el presente periodo vacacional; “el organismo operador es quien se va a encargar ya de que opere de manera adecuada, pero técnicamente está preparado para recibir a la población flotante”.
Precisó que las siguientes administraciones deberán dar continuidad al mantenimiento para su conservación y estar bajo la norma para la protección de este sitio turístico.