El presidente Andrés Manuel López Obrador anunció la creación del Instituto Nacional de Salud para el Bienestar, con el que se pretende dar atención a la población que no es derechohabiente del IMSS o ISSSTE. Iniciará operaciones en ocho entidades, hasta integrar los 32 estados.

“Vamos a reestructurar todo el sistema de salud, vamos a crear un Instituto Nacional de Salud para el Bienestar que se va a ocupar de la atención de quienes no tienen posibilidades de contar con un seguro”, explicó el mandatario durante la conmemoración del Día Mundial de la Salud.

En su mensaje, destacó que más de 60 millones de mexicanos no cuentan con seguridad social y reiteró la intención de su administración de federalizar la atención médica en el país y mejorar los servicios médicos.

“Queremos mejorar el sistema de salud pública como muchas otras asignaturas, como muchos otros grandes y graves problemas nacionales, tenemos que garantizar en los hechos, en la realidad, en la práctica, el derecho a la salud, que ya está contemplado en la Constitución, pero que es letra muerta porque en realidad no hay ese derecho”, apuntó.

López Obrador arremetió contra el Seguro Popular, pues dijo que “ni es seguro, ni es popular” dado que en algunos casos los recursos sólo sirvieron para enriquecimientos ilícitos y reiteró que dicho sistema desaparecerá, una vez que se modifique la Ley General de Salud.

Reiteró que su gobierno heredó un sector salud “aún más destruido y corrompido que el educativo”, por lo que, dijo, se dará a la tarea de “romper inercias políticas y reformas estructurales” para recuperar el federalismo de la Secretaría de Salud.

El objetivo del nuevo Gobierno, abundó el presidente, es garantizar el derecho a la salud para todos los mexicanos y que a final del sexenio se pueda decir que la atención médica y los medicamentos en México van a ser gratuitos. “Se va a garantizar el derecho a la salud, será una hazaña, pero es un compromiso y se va a cumplir”, afirmó.