Por segunda ocasión, el gremio periodístico de Jalisco se une a la movilización nacional “No se mata la verdad” en Plaza de Armas ante la ola de violencia que se vive en el país contra el gremio.
En Plaza de Armas se colocó un altar simbólico para recordar a los 150 periodistas asesinados desde el 2000 a la fecha, de los cinco han sido en este año, posiblemente relacionados con su labor.
El gremio jalisciense dio el pase de lista: Lourdes Maldonado López, José Luis Gamboa Arenas, Margarito Martínez Esquivel, Roberto Toledo Barrera y Heber López Vázquez. La y los periodistas eran de Veracruz, Baja California, Oaxaca y Michoacán.
El gremio jalisciense exige a las autoridades de los tres niveles de gobierno el cese a la violencia máxima como el asesinato contra las y los trabajadores de los medios de comunicación, pero también, expresaron otras formas de violencia “la evasión de nuestros derechos laborales, las y los trabajadores de los medios laboramos durante largas jornadas con salarios miserables, sufrimos acoso laboral y sexual, tememos por nuestra seguridad y aun así no tenemos garantizados una vejez digna en caso de que lleguemos a la vejez”.
Asimismo, expusieron que al Estado mexicano ha mantenido silencio y los asesinatos continúan en México.
Las y los periodistas manifestaron que seguirán “manifestándonos, pero también de forma organizada y permanente (…) es urgente que cese la violencia hacia la prensa”.
Las y los camarógrafos de Jalisco mantuvieron sus cámaras en el suelo como símbolo exigencia al Estado mexicano de alto a la violencia contra el gremio.