En las últimas horas, se ha confirmado que Raúl Rocha Cantú, el empresario mexicano copropietario de la franquicia Miss Universo, ha sido imputado formalmente bajo cargos relacionados con tráfico de hidrocarburos y presunto lavado de activos. La noticia ha sacudido tanto al sector empresarial como al de entretenimiento.
Las investigaciones apuntan a irregularidades en la comercialización de combustibles a través de empresas fantasma, operaciones que habrían financiado adquisiciones de alto perfil. La defensa del empresario no ha emitido comunicado hasta el cierre de esta edición.
Impacto: Las acciones de sus empresas asociadas cayeron un 12% en la bolsa tras filtrarse la carpeta de investigación. Se habla de montos superiores a los 500 millones de pesos en operaciones sospechosas.
Analistas políticos ven en este movimiento un mensaje claro del Gobierno Federal contra la evasión fiscal de grandes capitales, sin importar su perfil mediático.
La franquicia de Miss Universo no se ha pronunciado sobre el futuro de su administración tras este golpe legal.



