Hace 15 años, desde su primera campaña presidencial en 2006, Andrés Manuel López Obrador planteó la idea de promover una revocación de mandato con la premisa “el pueblo pone y el pueblo quita”.
Luego de ganar la elección presidencial en 2018, entregó documentos con el mismo propósito que se constituyó en una de sus más reiteradas promesas electorales. En 2019, ya bajo su mandato, se aprobó la reforma que en el artículo 35 de la Constitución de los Estados Unidos Mexicanos, establece la revocación de mandato. Y justo cuando se está en el límite de los tiempos marcados para llevar a cabo este ejercicio, AMLO y miembros de la Cuarta Transformación utilizan sospechosa y perversamente la figura de “ratificación” de mandato en lugar de “revocación”.
Algunos analistas señalan que el objetivo real de Andrés Manuel es lograr una doble legitimidad como presidente, derrotando no sólo a los partidos de oposición, sino a empresarios y líderes de opinión en su contra, dos años antes de iniciar un nuevo sexenio.
Esto sin duda fortalecería a Morena, partido que lo llevó al poder, y a su candidato de cara a las próximas elecciones presidenciales.
Pero, en primer término, habría que revisar en qué consiste esta nueva figura democrática establecida en la ley desde 2019.
Hay que decir que se trata de un proceso mediante el cual los ciudadanos pueden decidir si quieren que el presidente continúe con su mandato; si gana el número de personas que quieren la revocación de mandato, entonces quien ocupe la presidencia del Congreso tomaría su lugar de forma provisional y después el Congreso nombraría a quien debe concluir con el periodo.
En la reforma al artículo 35 Constitucional, apartado 8 Fracción IX, que fue aprobada hace dos años se establece esta consulta sólo se podrá pedir una vez cada sexenio y tendrá que solicitarse durante los tres meses siguientes a la conclusión del tercer año de gobierno. Señala además, se requiere el 3% de ciudadanos inscritos en la lista Nominal y este porcentaje debe ser de al menos 17 entidades del país. El periodo de captación comprende del 1 de noviembre al 15 de diciembre de 2021. También establece que la revocación de mandato debe ser solicitada por los ciudadanos.
INE APROBÓ LOS LINEAMIENTOS
PARA REVOCACIÓN DE MANDATO
El pasado 28 de agosto, el Instituto Nacional Electoral (INE) aprobó los lineamientos para la realización de la revocación de mandato que se realizará en 2022, los cuales tienen como objetivo sentar las bases normativas, fundamentar la solicitud de los recursos presupuestales y brindar certeza a la ciudadanía, partidos y actores políticos, así lo señaló el consejero presidente, Lorenzo Córdova.
Entre las normas avaladas por los consejeros durante la Sesión Ordinaria del Consejo General del INE, se encuentran: la instalación de 161,000 casillas; así como la contratación de 5,430 supervisoras y supervisores electorales; de 32,421 capacitadores asistentes y 484,000 funcionarios de casillas.
Además, se estableció que desde que se emita la convocatoria y hasta que concluya la jornada de revocación, no se podrá difundir propaganda gubernamental de cualquier orden de gobierno con excepción de las campañas de información relativas a los servicios educativos, de salud y protección civil como establece en la Constitución.
En la Sesión Ordinaria, Lorenzo Córdova resaltó que los lineamientos aprobados tienen el propósito de “subsanar un incumplimiento del Poder Legislativo, que a la fecha no ha emitido una ley que dé claridad sobre los procedimientos a seguir en la revocación de mandato”, así como justificar la solicitud de presupuesto para el ejercicio, resaltó.
PRESUPUESTO Y
CONFRONTACIÓN
El tema es que hasta el día de hoy no se tiene certeza de que se vaya a llevar a cabo la consulta para la revocación de mandato, toda vez que están inmersos en una seria confrontación el titular del Ejecutivo y los integrantes del Instituto Nacional Electoral que tutela Lorenzo Córdova.
Se menciona que fue para culpar al Instituto Nacional Electoral y provocar su desaparición, que los diputados del partido en el poder junto con sus aliados y la clara instrucción presidencial, le asestaron un duro golpe la semana pasada al aprobar el Presupuesto de Egresos de la Federación 2022 (PEF) con una disminución de casi 5 mil millones de pesos, lo cual complica no sólo la realización de la consulta para la revocación de mandato sino las elecciones para gobernador en seis entidades que deberán celebrarse el año entrante.
De ahí que se escuchen serios reclamos y consignas por parte del Consejero electoral Ciro Murayama, y el Consejero presidente Lorenzo Córdova.
El primero, ha descrito como “Crónica de un golpe anunciado”, el recorte presupuestal al INE, que mediante un tuit, describió en tres actos. El consejero explicó que primero buscaron promover la consulta de revocación de mandato, luego reducir los recursos al instituto para después acusarlo de ineficiente y de negarse a realizar la consulta, con el objetivo de atacar la autonomía e independencia del Instituto
Por su parte, el valiente Lorenzo Cordova, que hace unos días enfrentó en la Cámara de Diputados la furia de un rebaño adoctrinado para ofender, injuriar, y atacar a sus oponentes, fijó también postura mediante Twitter:
“El @INEMexico hará todo lo posible para llevar a buen puerto la Revocación de Mandato, si ésta es promovida por la ciudadanía. Pero no pondrá en riesgo otros derechos políticos de la ciudadanía, derechos laborales del personal del INE ni actividades sustanciales.
2. Hoy conocimos en Consejo General del @INEMexico el Primer Informe parcial del Plan Integral y Calendario del proceso de Revocación de Mandato, una prueba de que el instituto cumple a cabalidad con sus obligaciones constitucionales.
3. En su momento, el Consejo General del @INEMexico hará los ajustes presupuestales para garantizar el derecho de la ciudadanía a un eventual proceso de Revocación de Mandato, y emprenderá las acciones jurídicas pertinentes ante el recorte hecho por la mayoría en @Mx_Diputados
4. Si en algún momento un posible ejercicio de Revocación de Mandato está en entredicho, esto no es responsabilidad del @INEMexico , sino de quienes tienen la obligación de proveer los recursos presupuestales suficientes para llevar a cabo dicho proceso”.
El presidente López Obrador por su parte, aseguró este recorte no afectará la consulta de revocación de mandato y ‘recomendó al INE’ seguir una política de austeridad.
“Yo no opino lo mismo (que están en riesgo la consulta). Tienen recursos suficientes, que lleven a cabo un plan de austeridad,ganan el doble de lo que gana el presidente, se rayan. Que ya le bajen a los viáticos, a las comidas y los vinos, todos los gastos superfluos”, dijo.
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