En julio pasado ocurrieron dos de los eventos más relevantes en materia espacial, intergaláctica y/o planetaria, tras concretarse no uno sino dos viajes espaciales con tripulación que pagó su derecho a estar en sitio, abriendo el camino a lo que se denomina Turismo Espacial, donde cualquiera que cuente con los recursos podrá pagarse un viaje, conocer, observar y explorar el misterio del universo y lo que hay más allá del planeta Tierra.
Quizá las generaciones actuales no lo vimos venir, no imaginamos que nos tocaría presenciar lo que solo ocurría en series de televisión, en la pantalla grande, o en la imaginación, pero henos aquí, siendo testigos de la historia, algo así como cuando el hombre llegó por primera vez a la luna.
La carrera por conquistar el espacio se ha intensificado en 2021 y la diferencia entre los viajes realizados por Virgin Galactic y Blue Origin son de apenas unos días, sin embargo las diferencias entre la manera de explorar la órbita son puntuales.
En el caso de la empresa liderada por Richard Branson se trató de un viaje hecho en un avión espacial supersónico, mismo que fue desarrollado por Virgin Galactic y que llevó el nombre de VSS Unity. En este viaje, realizado el 11 de julio, Branson fue acompañado por dos pilotos y otros tres pasajeros, aterrizó en una pista de la base aérea Spaceport America después de alcanzar los 86 kilómetros de altura.
Una vez apagado el motor, los pasajeros pudieron desprenderse de sus asientos y flotar durante unos minutos en ingravidez, admirando la curvatura de la Tierra desde una de las 12 ventanas de la cabina.
Dentro de la nave los pasajeros además experimentaron hasta tres G de fuerza por el estallido de aceleración extrema y lograron ver cómo el cielo se desvanecía y se convertía en oscuridad con estrellas, sin embargo a pesar de haber experimentado esto no salieron de órbita.
“Una experiencia única en la vida” comentó Branson poco antes de volver a la Tierra y convertirse en el primer multimillonario en viajar al espacio en una nave desarrollada por una empresa que él mismo fundó.
Durante el viaje Branson no sólo consiguió esta misión, sino también evaluó la experiencia que futuros clientes podrían tener con Virgin Galactic. De acuerdo a la empresa unas 600 personas ya compraron un boleto para viajar con ellos, entre los personajes está Elon Musk, Justin Bieber o Leonardo DiCaprio, sobre el costo de los tickets, de acuerdo a diversos reportes tienen un precio promedio de 250,000 dólares.
La primera vez que Branson dijo que viajaría al espacio fue en 2004, sin embargo hasta este año logró la misión.
En el caso del viaje que realizó Jeff Bezos el 20 de julio, la empresa utilizó un cohete llamado New Shepard, un propulsor de seis pisos de altura con una cápsula semioval en la punta. La cápsula de esta nave se aceleró hacia el espacio usando un motor de hidrógeno líquido, por lo que no emite gases de carbono, al llegar a los 75 kilómetros de altura se separó y siguió viajando hasta alcanzar 100 km de altitud.
Aunque llegó a la línea Karman, la cual indica el inicio del espacio, Blue Origin también se mantuvo dentro de la órbita.
Los miembros de esta tripulación fueron Jeff y Mark Bezos, Wally Funky, una ícono de la aviación que tiene 82 años de edad, además de Oliver Daemen, quienes estuvieron durante 11 minutos ‘en el espacio’.
Dentro de la experiencia que se vivió al interior de la cápsula fue la sensación de ingravidez, así como admirar la curvatura de la Tierra por las seis ventanas de la nave. Después de ese tiempo la cápsula comenzó su caída libre.
“Esta primera tripulación de astronautas se inscribió en los libros de historia del espacio, abriendo la puerta por la que pasarán muchos más”, escribió Blue Origin en Twitter.
Aunque el costo por viajar con Blue Origin es incierto se tienen pistas del monto que alcanzó uno de los asientos en la misión de hoy. De acuerdo con el monto de la subasta que se hizo por ese espacio, el ticket de Blue Origin costó 28 millones de dólares, sin embargo este lugar no se ocupó por un conflicto en la programación.
ELON MUSK, TURISMO
ESPACIAL DE SPACEX
De los tres millonarios protagonistas de lo que será el turismo espacial, Elon Musk es el único que no ha tenido un lanzamiento con una misión, pero su empresa es la única que ha salido fuera de órbita en un viaje realizado con la NASA.
Aunque cabe decir que SpaceX está planeando su propio lanzamiento al espacio programado para finales de 2021, bajo la tripulación del Inspiration4, durante este viaje se espera que la nave Crew Dragon alcance una altitud de 540 kilómetros y esté en órbita durante 3 días.
El viaje, a diferencia de lo que ha pasado con Virgin Galactic y Blue Origin, implica despegues de alta velocidad que rompen la gravedad y duraciones más largas.
En el caso de Inspiration4 se tendrá una tripulación conformada por Jared Isaacman, fundador y CEO de Shift4 Payments, quien donará tres asientos dentro de la misma misión. Además viajarán Hayley Arcenaux, una joven de 29 años que ya sobrevivió al cáncer y que se desempeña como asistente médico en el hospital St Jude de Tennessee, así como la Dra. Sian Proctor, profesora de geociencias y especialista en comunicación científica y Christopher Sembroski, consejero del campamento educativo Space Camp.
PERSPECTIVAS POSITIVAS
PARA LA INDUSTRIA ESPACIAL
Si bien de estas tres empresas solo una es pública, existen en el mercado instrumentos como los ETF en los que se puede invertir para poder beneficiarse del crecimiento de este negocio. Entre las opciones de inversión se encuentra el fondo denominado UFO (Procure Space ETF).
Este fondo en el último año ha generado un rendimiento de 55%. Además de este instrumento también hay otro a considerar que es el ETF SPDR S&P de Kenso Final Frontiers. Ambos tienen una política del 80% para invertir en empresas que reciben al menos el 50% de sus ingresos en uno o más segmentos de la industria espacial.
Por otro lado, de las empresas que podrían considerarse atractivas para seguir destacan: Gilat Satellite Networks, Virgin Galactic, Trimble Inc., Garmin, Maxar Technologies, Global Star, MDA y otras más.
Cabe señalar que las perspectivas para el sector de la industria espacial son positivas y por ello se encuentra en la mira de muchos de los fondos de inversión. Al respecto Morgan Stanley pronosticó que los ingresos de este sector podrán llegar a crecer más de un trillón hacia el año 2040, mientras que Bank of America (BofA) señala que podrían crecer hasta 3 trillones.
A pesar del furor, principalmente de los millennials, en este sector, también hay un grupo de inversionistas que se mantiene escéptico de que este sector deje dinero en el corto plazo. Ellos señalan que la industria de la aviación es un nicho que no ha dejado mucho dinero en los últimos años, entonces se preguntan por qué el sector espacial sí sería una buena inversión.
Estos inversionistas afirman que solo son ego-boosters de los dueños de este tipo de empresas que ahora las impulsan.
*Con información de medios
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