Tepic.- El profesor Liberato Montenegro Villa este 13 de julio cumplió un año de haber fallecido. Para muchos líderes morales del magisterio, sobre todo del integrado a la Sección XX del SNTE. ¿Quién será capaz de llenar aquella enorme oquedad con base en sapiencia, experiencia, ideal y habilidad en el trato cotidiano? Es la interrogante que se planteó el reportero de la gente. Por consecuencia habría que buscar definición clara y contundente.
Consideré apropiado encontrar la opinión de Gerardo Montenegro Ibarra, hijo primogénito del profesor Liberato. Sin remilgo alguno, el pretendido fijó cita para entrevista en oficinas del complejo residencial donde se asienta el edificio sindical de la Sección XX en Tepic.
Empieza el cuestionario con la pregunta siguiente:
-Muerto el maestro Liberato, ¿también fenece la corriente política que al interior de la Sección XX del SNTE él lideró?
-Seguirá vigente. ¿Por qué? Porque agrupa principios, agrupa causas e intenciones, sobre todo agrupa compañeras y compañeros del gremio que creen en la organización sindical.
Existe un principio central que genera ese agrupamiento y cohesión: la unidad. En tanto haya de muchos trabajadores interés e intención por fortalecer la unidad sindical, en esa misma medida se mantendrá la corriente política al seno de la Sección XX.
-Me dicen que usted, como hijo de Liberato, está llamado a ser el sucesor. ¿Cree llenar los zapatos de tío Libe?
-Ninguna personalidad es repetible. Es imposible. Mi padre construyó su biografía en función a condiciones del aspecto histórico que le correspondió vivir.
Mi circunstancia con seguridad ha sido diferente. Yo no pretendo llenar el espacio de nadie, menos asumir personalidad irrepetible. Sí me asumo como un cuadro de la Sección XX, integrante de la organización sindical, capaz de responsabilizarme de suficientes tareas para aportar a la unidad del sindicato con base en acciones aprendidas a mi padre, pero además dignificar su legado como luchador y líder sindical.
Como tesis fundamental él siempre planteó la lucha por la unidad de los maestros, la lucha por la unidad de los trabajadores, con base en el abanderamiento de causas centrales que tuvieron que ver con la reivindicación laboral, la reivindicación salarial, la reivindicación de las prestaciones y el mejoramiento de las condiciones de vida.
En esa dirección, yo trabajaré como un cuadro de la organización, como elemento del sindicato, que cumple con un legado vigente. Esa es mi responsabilidad, y esa es mi tarea.
-¿Cuál considera es el legado fundamental del profesor Liberato Montenegro Villa?
-Él llega a Nayarit como maestro de grupo, en condición de docente inicia su trabajo. Su contacto con el sindicalismo comienza en la delegación sindical existente en Ixtlán del Río. Forja el Movimiento Sindical Renovación y en consecuencia auspicia en dicha delegación la consolidación del esquema de unidad que se traduce en ventaja a los maestros y trabajadores, es decir, se mejoran para ellos condiciones salariales y laborales, así como profesionales.
La Sección XX en Nayarit también adquiere presencia política, social, de fundamental importancia. Creo que la aportación de Liberato Montenegro a la lucha sindical de los maestros radica en la unidad, desde la visión de la unidad sindical construir fortalezas de carácter gremial e individual para los trabajadores.
-Entonces, ¿de entre maestros allegados a Liberato hay quien pretenda asumir el liderazgo de la corriente política en la Sección XX?
-Hay un grupo importantísimo, núcleo muy amplio de compañeras y compañeros, amigos contemporáneos, otros de nuevas generaciones, con decisión de trabajar en los principios que él planteaba, todo sobre la base de consolidar la unidad referida.
Participan exsecretarios generales de la sección, maestros que hoy asumen tareas docentes, educativas, jóvenes de las nuevas generaciones que convivieron y platicaron con él, que tuvieron encuentros con él. Todos coinciden en trabajar para sostener la posición unitaria de la sección que consolide y garantice beneficios para todos.
Gerardo Montenegro Ibarra platica padecimientos experimentados por su señor padre debido a las enfermedades que lo postraron en cama del hospital Puerta de Hierro en la ciudad de Guadalajara.
El primogénito de Liberato Montenegro Villa desliza sobre el dolor abdominal y pérdida de visión, por ello necesaria cirugía para trasplante de córnea que no se realizó pese a la disminución del sentido de la vista, con el agravante de que para ello debería estar en condiciones plenas de salud.
El profesor Liberato sí fue intervenido mediante operación de los intestinos que resultó exitosa. Enseguida cirugía en los ojos –no para el trasplante de córnea- con serias complicaciones cerebrales que finalmente lo llevaron a la tumba el 13 de julio de 2020.
Recordar, a Gerardo se nota le produce intenso dolor, sentimiento que intenta disimular con respuestas llenas de energía -pero meditada la idea- al cuestionario que presenta el reportero de la gente.