El presidente de Coparmex Nayarit, Alejandro Valdés Menchaca calificó como lamentable la aprobación de la reforma a la Ley de la Industria Eléctrica, en el pleno del Senado, en “fast track”, que dejó fuera a la ciudadanía, personas expertas en el tema y empresas que con antelación alertaron sobre los efectos dañinos de la legislación.
“No se realizó ningún cambio y desde el análisis que se ha hecho desde la Coparmex nacional, a cargo de expertos, se concluye, que esta reforma convierte a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) en un monopolio, lo que generará graves consecuencias económicas, legales, sociales, de salud y medioambientales a nivel nacional e internacional”, asentó el líder empresarial.
Asimismo, dijo que esta reforma obliga a que la energía verde sea despachada después de energías más caras y contaminantes y no contribuye a revertir los 15 meses al hilo en los que la confianza empresarial se encuentra en niveles pesimistas. Agregó, que, en los momentos actuales, debe otorgarse certeza a los inversionistas sobre las reglas, a partir de las cuales se tomaron decisiones de inversión que ya se encuentran en operación.
El presidente de Coparmex Nayarit, estableció que también impactará negativamente los acuerdos tomados en materia de protección de las inversiones en territorio nacional, no solo en el T-MEC, sino también en el Tratado Integral y Progresista de Asociación Transpacífico (TIPAT), así como en acuerdos ya concluidos pero pendientes de ratificar, como el caso del Tratado de Libre Comercio entre la Unión Europea y México (TLCUEM modernizado).
Asimismo, señaló, que contraviene los avances convenidos en el Acuerdo de París ratificado por México y más de 180 países contra el cambio climático, incumple con el Objetivo de Desarrollo Sostenible 7 (ODS7) relativo a Energía Asequible y No Contaminante y, además, es una reforma costosa en términos sociales porque podría influir de forma negativa en hacer aún más lenta la recuperación y privar al país de nuevos empleos.
Por último, precisó que Coparmex busca un país con futuro y apuesta por tener un sistema eléctrico confiable, basado en energías limpias y que sea pilar para generar certeza a la inversión, por lo que, ya se analizan las rutas legales necesarias para evitar el daño al país y a su sector productivo