Washington.- Los candidatos para las elecciones presidenciales del 3 de noviembre 2020 en Estados Unidos proponen dos enfoques distintos para la economía norteamericana. Mientras Donald Trump propone un proyecto que priorice menos regulaciones y menos impuestos a las empresas, Joe Biden ha expuesto propuestas encaminadas a mayores impuestos a grandes empresas y una preocupación por el cambio climático. No obstante, ambos candidatos coinciden en la importancia de mantener activos financieros en la senda alcista.
Donald Trump busca seguir con la senda alcista de los principales índices de los mercados financieros donde el S&P 500 ha avanzado +57,2% a lo largo de su gestión como presidente de Estados Unidos a pesar de los conflictos comerciales con China y de la crisis económica del coronavirus. El presidente pretende seguir las políticas económicas de recortar regulaciones y bajar impuestos a grandes empresas para beneficiar a la economía.
Trump pretende enfocar esfuerzos en el sector energético como eje central de campaña, para dar un impulso económico a la resentida economía norteamericana. Contrario a lo propuesto por Biden, el candidato republicano pretende priorizar a empresas de hidrocarburos como lo hizo durante los primeros años de gestión. De esta forma, en su propuesta de proyecto económico pretende dar prioridad a los puestos de trabajo de empresas dedicadas al petróleo y a mineras ubicadas principalmente en Ohio y Pensilvania.
Por el lado contrario, Joe Biden, el candidato demócrata, propone un alza al salario mínimo para mejorar los ingresos de los trabajadores y de esta forma incentivar el consumo mermado por la pandemia, así como devolverles poder de negociación en los contratos. También propone mejorar la regulación de energía para lograr una drástica reducción de las emisiones de dióxido de carbono.
En las semanas previas a las elecciones, la racha alcista de las bolsas reportadas ha coincidido con el afianzamiento de la ventaja en las encuestas del candidato demócrata por encima de Donald Trump. Por lo anterior, se puede observar que los mercados financieros no temen la probable victoria de Joe Biden, que también podría significar una amplia mayoría del partido demócrata en el Congreso.
Una de las razones por las cuales los mercados financieros tienen confianza en el candidato demócrata, es la gestión ortodoxa de la economía que se pretende adoptar. Tanto Biden como la candidata a vicepresidenta, Kamala Harris, son de una visión moderada dentro del mismo partido demócrata, por lo cual no se esperan cambios abruptos en la condición de la economía que dañe la confianza de los inversionistas.
Así, ambos candidatos ofrecen condiciones tanto económicas como políticas para que la economía norteamericana se recupere posterior a la pandemia y los activos financieros sigan su senda alcista. Sin embargo, los dos difieren en el enfoque para enfrentar la crisis, así como en materia de desarrollo de sectores clave en el crecimiento económico de Estados Unidos.