Los teléfonos inteligentes con pantalla plegable han llegado para quedarse. Aunque el concepto no es algo nuevo, ya que hace más de 24 años la compañía Motorola revolucionó el mercado con su dispositivo móvil clamshell al que denomino StarTAC. Ahora, las empresas Huawei, Samsung y una vez más Motorola buscan revolucionar la industria de los smartphones con una apuesta retro, con el propósito de permanecer más allá de un simple moda.
Fue 2019 un año que marcó la pauta para las empresas líderes en el mercado de los teléfonos inteligentes al lanzar sus teléfonos con pantallas flexibles como el Mate XS de Huawei uno de los teléfonos más vendidos en China, el Motorola Razr, un concepto nuevo inspirado en uno de los teléfonos más vendidos por la compañía que ahora pertenece a Lenovo y el Samsung Galaxy Z Flip y Galaxy Fold en su primera versión.
En primera instancia la experiencia del uso de estos dispositivos con pantallas plegables no es exactamente la misma en comparación con un smartphone convencional. El uso de la pantalla puede resultar en ocasiones benéfico para los usuarios, aunque no está de más decir que durante su uso diario algunas características pierden sus bondades.
Asimismo, la resistencia de los materiales principalmente en la pantalla puede significar un problema para las personas quienes utilizan los teléfonos inteligentes como una herramienta de trabajo, pues los pliegues del dispositivo han mejorado con el tiempo. Es cierto que sí existen algunos problemas de diseño y visualmente pueden resultar imperceptibles, pero al tacto generan una sensación de bordes en la pantalla, eso para muchos usuarios puede resultar incómodo y sólo el uso continuo puede dar la respuesta.
Otra de las desventajas con en este tipo de dispositivos es su precio, porque no son teléfonos nada baratos, los precios oscilan entre los 30 mil a 50 mil pesos mexicanos. Aunque la demanda haría que los precios bajen si la industria de teléfonos ve un negocio creciente y empieza a implementar este diseño en teléfonos de gama media o baja, existe la posibilidad de ver teléfonos clamshell más baratos, pero por ahora son dispositivos que van dirigidos también a un sector como el ejecutivo quien podría sacarle un mayor provecho a ese tipo de móviles.
Realmente, no debería sorprender a nadie la tendencia que los teléfonos plegables están marcando en la industria, además, los fabricantes deben apostar por tecnologías cuyo desarrollo no está lo suficientemente avanzado y no será hasta futuras ediciones cuando alcance el punto máximo de madurez necesario en aspectos tan importantes como el diseño y durabilidad de los materiales. Por ahora, Huawei, Samsung y Motorola deben llevar a otro puerto un concepto que si bien no es nuevo sí podrían convertirlo en un mercado alterno al de los smartphones convencionales.