De acuerdo con los especialistas de Long-Term Electric Vehicle Outlook, departamento a cargo de la empresa BloombergNEF (BNEF), se prevé que la venta de vehículos eléctricos registre un repunte importante a mediano y largo plazo, a pesar del bajo crecimiento presentado actualmente, cuya expectativa para 2020 es de una caída del 18%, como consecuencia de la crisis sanitaria y cambios en las vías de distribución de energéticos, que frenan la movilidad y actividades en la industria automotriz.
Las estimaciones realizadas para este sector de la industria indican que los automóviles eléctricos conformarán el 58% de las ventas de vehículos para pasajeros en 2040, con el 47% correspondiente a modelos de dos ruedas, y representarán el 31% de la flota en circulación. Con respecto a los autobuses y medios de transporte colectivos, los modelos eléctricos conformarán el 67% de sus unidades, mientras que los vehículos comerciales ligeros formaran el 24%.
Un elemento fundamental en consideración por parte del departamento de análisis de trasporteseElectrificados BNEF, a cargo de Aleksandra O’Donovan, es la infraestructura necesaria para implementar la transición a la movilidad basada en vehículos electrificados. Los cálculos emitidos por este departamento indican que se requiere una inversión acumulada de 500 mil millones de dólares, 290 millones de estaciones de recarga, y una planeación adecuada para las vías de distribución y producción de energéticos.
Con respecto al tema de la carga energética requerida, tanto en estaciones especializadas como en las viviendas con vehículos particulares, BNEF prevé que la demanda de energía conformará el 78% de la inversión acumulada en 2040. Para los puntos de recarga, estrictamente públicos, el presupuesto será de 111 mil millones de dólares; sin embargo, la relación entre las autoridades gubernamentales y la iniciativa privada aún se discute, como consecuencia de la rentabilidad y tasas de uso.
Asimismo, debido al impacto de movilidad en sector automotriz, y por la volatilidad de los precios del crudo, las repercusiones en el mercado del petróleo comienzan a registrar cifras importantes. La acelerada electrificación de los medios de transporte, sobre todo en la clase de dos ejes, ha generado una disminución de 17.6 millones de barriles en la demanda diaria de petróleo en todo el mundo; esta cifra ha repercutido en bajas ventas de automóviles con motor de combustión interno, cuya expectativa de caída para 2020 es de 23%, según los especialistas de Long-Term Electric Vehicle Outlook.
En América Latina la venta de automóviles eléctricos es un negocio emergente, cuya extensión de aranceles se encuentra principalmente en México, Brasil, Argentina, Colombia, Paraguay, Costa Rica, y Ecuador, con importaciones que registraron su aumento más importante entre 2017 y 2018, de 304%. Según las cifras del Observatorio Económico Latinoamericano, México reportó 291 importaciones de vehículos eléctricos de Estados Unidos, y 277 de Alemania en 2019. Por su parte, Argentina y Brasil son los países con mayor cantidad de importaciones desde China, con mil 669 y 16 mil 876 unidades, respectivamente.