La vocera de la Coordinadora de Víctimas de Trauma Ocular, Marta Valdés afirmó que se ha hecho muy poco “o nada” ante los actos de represión cometidos por Carabineros contra los manifestantes chilenos que han tomado las calles en los últimos meses.
La vocera de la coordinadora habló para el diario Universidad de Chile sobre el supuesto programa de reparación ocular que prometió el mandatario chileno, Sebastián Piñera, desde el pasado 11 de noviembre, el cual, “no quedó más que en una promesa”, denunció Valdés.
La organización que congrega a familiares y víctimas de trauma ocular y violaciones a derechos humanos perpetradas por Carabineros afirmó que la ayuda no ha llegado ni ha existido interés del gobierno por contactar a la población afectada.
Las críticas de la coordinadora al gobierno de Chile se centraron principalmente en la impunidad ante el actuar del director general de Carabineros de Chile, Mario Rozas, quien ha conservado el cargo a pesar de ser quien da las órdenes a la policía chilena.
“Es cortar el hilo por lo más débil. Siempre se apunta al que sale a la calle y dispara, pero aquí hay órdenes. Llama la atención que, con la conducta que ha tenido Mario Rozas, el Gobierno no tome medidas contra este personaje”, denunció Valdez y exigió la renuncia del líder del cuerpo de Carabineros.
La vocera de la coordinadora también habló del papel del ministro del Interior, Gonzalo Blumel, a quien criticó por mantener la línea de su antecesor, Andrés Chadwick, quien fue inhabilitado por violaciones a derechos humanos durante la emergencia constitucional.
Durante la entrevista, la representante de la coordinadora habló de las consecuencias que el trauma ocular tendrá para las víctimas, quienes quedaron marcadas de por vida por ejercer la libertad de expresión y protestar contra la gestión de Sebastián Piñera.
“Estamos hablando de mutilaciones para toda la vida, hay muchos jóvenes con trauma ocular que no pueden seguir estudiando, hay muchos que no van a poder ejercer sus trabajos porque sus trabajos dependen absolutamente de la vista y, de esas reparaciones, el Gobierno no ha hablado”, declaró.
La Superintendencia de Salud de Chile describe el trauma ocular como una lesión aguda sobre el globo ocular y su estructura, lo que afecta la función visual por un daño tisular de gravedad.
Este padecimiento es el que ha afectado a más de 350 personas en Chile por las acciones de Carabineros en sus intentos por dispersar las protestas, según reporta el Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH).
En noviembre, la Alta Comisionada para los Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y expresidenta de Chile, Michelle Bachelet, afirmó en una entrevista que el incremento en los casos de trauma ocular podría deberse a que la policía chilena no ha seguido los protocolos.
La expresidenta explicó que las balas de goma jamás deben dispararse hacia la cara de los manifestantes, sino debajo de la cintura, por lo que, al no respetarse las medias de seguridad, se ha caído en un uso desmedido de la fuerza, lo que marcará la vida de decenas de jóvenes chilenos.