El Día de Muertos es una tradición mexicana celebrada el 2 de noviembre de cada año, fecha en la que honramos y recordamos a familiares y amigos ya fallecidos, cada pueblo o región tiene sus propias tradiciones y formas de festejar tan importante día, las calles y negocios de la ciudad se pintan de colores, papel picado, calaveras, pan de muerto y música tradicional.
En el estado de Nayarit no es la excepción, miles de ciudadanos acuden desde el primero de noviembre a los panteones municipales a limpiar y decorar el lugar de descanso de sus seres queridos; además, en los hogares es común instalar el altar, el cual es conformado desde dos a siete pisos, cada uno con su increíble significado, se ofrecen velas, flores, alimentos y objetos de uso cotidiano del difunto.
En la Calzada del Panteón de la capital nayarita se llevan a cabo diversas festividades y la principal atracción son los altares de muerto, cada dependencia gubernamental o escuela acude al lugar para participar y muchos tepicenses aprovechan para visitar el famoso Panteón Hidalgo, un icono de nuestro querido Tepic.
En el lugar uno de los asistentes comentó: “Nosotros celebramos el día 2 de noviembre, viniendo a visitar a los familiares ya fallecidos, mis tíos, abuelos y poniendo algún altar en la casa, es una tradición muy bonita de los mexicanos y hay que incentivarla con los jóvenes”.
En cuanto a lo significativo muchos coinciden en que es una fecha en la que los mexicanos festejan alegremente a pesar del fallecimiento de sus familiares.
Otros aún le temen a la muerte: “Recordando a nuestros familiares que se fueron, que nos ganaron en el camino, y esperamos no seguirlos tan pronto, ¿verdad?, durar un poquito más, pero pues no le queda a uno de otra, tenemos que llegar a donde tenemos que llegar”.
Es importante disfrutar y respetar las tradiciones por lo que es importante tomar en cuenta, como dicen por ahí que “hay que vivir sonriendo, para morir contentos”.
