La Comisión de Igualdad de Género de la Cámara de Diputados analiza una iniciativa de reformas al Artículo 36 de la Ley General para la Igualdad entre Mujeres y Hombres, para garantizar la participación igualitaria en altos cargos públicos y puestos de mando.
La propuesta fue presentada por la diputada Sara Rocha Medina, del PRI, quien destacó que, aunque es mayor el número de mujeres que laboran en la Administración Pública Federal, “existe una barrera que impide su ejercicio en puestos de alta dirección, y las que acceden suelen tener niveles salariales más bajos que los hombres”.
Ante estas circunstancias laborales de género, la legisladora planteó reformas legislativas con el objetivo de que las autoridades fomenten la participación igualitaria en los altos cargos para abatir la brecha salarial.
Rocha Medina pidió también reformar el Artículo 86 de la Ley Federal del Trabajo para que corresponda un salario igual entre mujeres y hombres, como entre pares, a trabajo igual desempeñado en puesto, jornada y condiciones de eficiencia también semejantes.
Hizo notar que de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) sólo dos de cada 10 puestos directivos en el marco de las administraciones públicas de los estados son ocupados por mujeres.
Además 53 por ciento de las empleadas de la Administración Pública Federal son mujeres, pero están concentradas en niveles de mando medio, de forma que los puestos directivos y de mayor jerarquía continúan controlados en mayor proporción por hombres.
Añadió que en lo que corresponde a las direcciones generales y las subsecretarías de Estado únicamente se ocupan en 20 por ciento por mujeres y se advierte que de las 19 secretarías sólo seis están encabezadas por funcionarias.
Respecto de la brecha salarial, indicó que ellas reciben un sueldo menor al de hombres que laboran en las mismas plazas, y de hecho la Comisión Nacional de los Derechos Humanos revela que dentro de las secretarías de Estado hay una diferencia del 12 por ciento en percepciones.