La canción Dark horse, que ha tenido mucho éxito en voz de la cantante estadunidense Katy Perry desde que fue lanzada en 2013, es una copia parcial de una canción de rap cristiano, determinó un tribunal de Los Ángeles, California.
Hace cinco años, el rapero Marcus Gray, conocido como Flame, interpuso la demanda bajo el argumento de que Perry se apropió del ritmo de su tema Joyful noise, que forma parte del disco Our world: Redeemed (2008).
Con la colaboración de Juicy J, Dark horse, del álbum Prism (2013), es uno de los temas de mayor éxito de Katy Perry; en él participaron Dr. Luke y Max Martin en el equipo de producción.
En el juicio, la artista, así como el resto de músicos y el equipo involucrado en la creación del sencillo aseguraron que jamás habían escuchado Joyful noise, de Flame.
De acuerdo con The Hollywood Reporter, los abogados de Perry sostuvieron que el parecido entre ambos temas consiste en ritmos básicos, por lo que Flame no podía reclamar derechos de autor, mientras que los representantes del rapero señalaron que Perry y su equipo copiaron una aparte importante de su canción.
El jurado determinó que los responsables del plagio son los seis compositores de Dark horse, que incluye a Perry y al rapero Juicy J, quien contribuyó con un verso del tema musical.
La canción ha vendido más de 13 millones de copias en todo el mundo y su vídeo fue el primero de una artista femenina en alcanzar mil millones de vistas en plataformas de reproducción.
Este martes se determinará lo que deberán pagar Perry y sus coautores por los daños, informó el diario estadunidense The New York Times.