Ocho de los más de 20 aspirantes a la nominación demócrata a la Casa Blanca criticaron hoy la política migratoria del gobierno del presidente Donald Trump que, afirmaron, llevaron a la separación de familias enteras y la detención de menores migrantes.
En un foro organizado por la Asociación Nacional de Funcionarios Latinos Electos y Designados y la cadena hispana Telemundo, los precandidatos demócratas a la Casa Blanca defendieron la necesidad de una amplia reforma migratoria.
También rechazaron la inclusión de una pregunta sobre la ciudadanía en el Censo 2020 que puede hacer que los latinos queden subrepresentados desde el punto de vista demográfico, lo que significaría menos ayuda, entre otras cosas.
Coincidieron que en caso de llegar a la Presidencia estadunidense emitirían órdenes ejecutivas para repetir el censo incluyendo a toda la población.
El senador por Vermont, Bernie Sanders, señaló que el Congreso tiene la capacidad de negar fondos para el censo si no se elimina el lenguaje segregacionista.
Aseveró que de llegar a la Casa Blanca usará todos “los poderes” de la Presidencia para revertir el daño ocasionado por Trump, en alusión a la advertencia lanzada el lunes pasado por el mandatario de que la próxima semana comenzaría a deportar a millones de migrantes indocumentados.
Señaló que no hay que olvidar que el gobierno de Trump “arranca a los niños de los brazos de sus madres (…) y que algunos de esos niños han muerto“.
El aspirante Beto O’Rourke, quien representó a El Paso, Texas, en la Cámara de Representantes entre 2013 y 2019, se comprometió en caso de llegar a la Casa Blanca a reunificar a las familias separadas por Trump y poner fin a la detención de niños en la frontera sur de Estados Unidos.
Señaló que Estados Unidos debe ser un país en el que el acceso a la salud y la educación sea un derecho, no un privilegio, y aseguró que su plan de crear un sistema de salud universal incluirá a los 11 millones de indocumentados.
“Hoy les hago una promesa muy simple: proteger a los indocumentados, una reforma migratoria integral, restituir el estatus legal a los 1.8 millones de jóvenes en DACA (Programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia). Crear una política humanitaria en la frontera será un tema prioritario de mi agenda“, dijo.
Mientras que el exgobernador de Colorado, John Hickenlooper, propuso dar inmediatamente a los indocumentados una visa de 10 años con extensiones que les permitan trabajar y poder visitar su país de origen. Se trata de que “salgan de las sombras y tengan vidas reales“.
El exsecretario de Vivienda, Julián Castro, de origen mexicano, se comprometió a usar el poder ejecutivo para expandir inmediatamente el DACA y para otorgar un Estatuto de Protección Temporal (TPS) para los venezolanos que han escapado de la crisis en su país y están en Estados Unidos.
En el foro participaron además las senadoras Elizabeth Warren, Amy Klobuchar, y el representante Eric Swalwell, entre otros. El gran ausente fue el exvicepresidente Joe Biden, quien lidera las encuestas electorales.
El encuentro se desarolló a cinco días del primer debate demócrata, que también se efectuará en Miami.