El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se comprometió hoy a apoyar a Canadá para lograr la liberación de dos canadienses detenidos en China, en una aparente represalia, luego que Ottawa arrestó a una ejecutiva de una empresa de telecomunicaciones del país asiático.

Durante un encuentro en la Casa Blanca con el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, Trump señaló que hablaría con el presidente chino Xi Jinping la próxima semana, en el marco de la Cumbre del G-20 en Japón, para buscar la liberación de los dos canadienses detenidos en Beijing.

“Cualquier cosa que pueda hacer para ayudar a Canadá, lo haré“, aseveró el mandatario estadunidense ante la pregunta de la prensa sobre si él mismo plantearía el caso ante Xi, reportó el diario canadiense Globe and Mail.

Trudeau informó en rueda de prensa que sostuvo largas discusiones con el presidente Trump sobre la situación de los canadienses -el exdiplomático Michael Kovrig y el empresario Michael Spavor- detenidos en diciembre pasado en el país asiático como sospechosos de participar en actividades que ponen en peligro la seguridad nacional.

“Tuvimos una conversación prolongada sobre la situación que actualmente enfrenta Canadá con China y la situación inaceptable que enfrentan dos canadienses“, dijo.

Sin embargo, rechazó responder si le había solicitado a Trump que retirara la solicitud de extradición de la directora financiera de la empresa tecnológica Huawei, Meng Wanzhou, detenida en diciembre pasado en Vancouver, en caso de que Washington alcance un acuerdo comercial con Beijing.

“Seguimos respetando el Estado de Derecho aquí en Canadá. Respetamos nuestra asociación y nuestros acuerdos, incluido nuestro acuerdo de extradición con Estados Unidos“, aseveró.

Ambos gobernantes se comprometieron además, a fortalecer la cooperación bilateral para el suministro de tierras raras, esenciales para fabricar desde teléfonos hasta material militar.

Con la intensificación de la guerra comercial de Estados Unidos con China, se ha hablado sobre la posibilidad de que el gobierno de Beijing prohíba las exportaciones de tierras raras a Estados Unidos.

“Las tierras raras utilizadas para la defensa, la manufactura y las industrias de alta tecnología son esenciales en nuestras economías y seguridad. Acordamos desarrollar una estrategia que alienta una mayor colaboración e inversión transfronterizas, con el fin de garantizar la competitividad futura de nuestras industrias minerales y la seguridad y protección de nuestras cadenas de suministro“, dijo Trudeau.

Esta sería la tercera visita de Trudeau a la Casa Blanca durante la administración de Trump, tras las realizadas en febrero y octubre de 2017.