El ministro ruso de Relaciones Exteriores, Sergei Lavrov, pidió hoy el repliegue de todas las tropas extranjeras de Afganistán, para impulsar las negociaciones de paz entre miembros de la insurgencia Talibán y políticos afganos.
En ceremonia en Moscú para celebrar el centenario del inicio de las relaciones diplomáticas entre Rusia y Afganistán, Lavrov afirmó que la única opción para restablecer la estabilidad y poner fin al conflicto afgano es la salida de todas las tropas extranjeras del país asiático.
“Rusia está convencida de que el conflicto en Afganistán no tiene una solución militar; la única forma posible de resolver la crisis, es lograr la paz por medios políticos y diplomáticos, abogamos por el retiro total de las tropas extranjeras del país”, indicó el canciller, según reporte de la agencia rusa Sputnik.
La ceremonia se efectuó en el marco de las conversaciones entre miembros del derrocado régimen del Talibán y políticos afganos, incluidos los principales líderes regionales y candidatos a la elección presidencial de septiembre en Afganistán.
“Estamos pidiendo una retirada total de las fuerzas extranjeras del país, reiteró Lavrov y pidió a todos los bandos del conflicto en Afganistán a iniciar lo más pronto posible las negociaciones con participación de una amplia gama de fuerzas sociales y políticas, luego de dar la bienvenida a la delegación talibán.
Las declaraciones del ministro ruso fueron en clara alusión a Estados Unidos, que tiene cerca de 14 mil soldados en Afganistán, como parte de una misión de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) para capacitar a las fuerzas de seguridad afganas en su lucha contra el Talibán y otros grupos extremistas.
El vicejefe de la delegación del Movimiento Talibán, Sher Mohamad Abas Stanikzai, también se pronunció a favor de la salidas de los militares extranjeros de Afganistán y reiteró que el grupo está dispuesto a continuar el diálogo para solucionar el conflicto en Afganistán.
“Las conversaciones de paz ‘son imposibles’ sin la retirada de tropas extranjeras de Afganistán. Todas estas tropas deben abandonar nuestro país. Son la raíz de todos los problemas y es por eso todavía permanecemos en el campo de batalla”, declaró.
El Movimiento Talibán, que proclama el extremismo religioso islámico, gobernó en Afganistán bajo la imposición de una de las más estrictas interpretaciones de la Sharia (Ley Islámica), que se hizo famosa internacionalmente por el maltrato a las mujeres.
Durante el régimen del Emirato Islámico de Afganistán, como se denominó el Talibán, no se permitió a las mujeres trabajar, asistir a una escuela o salir de casa sin su esposo, un hombre de su familia o en su defecto un tutor, encargado de supervisar que las afganas se comportarán bien en público.
El régimen fue derrocado tras la invasión de Estados Unidos a fines de 2001, luego de los atentados del 11 de septiembre de ese año contra las Torres Gemelas, orquestado por el fallecido líder de Al Qaeda, Osama Bin Laden, quien en ese entonces se refugiaba en Afganistán, protegido por el Talibán.