Poco después del mediodía de este domingo inició en el Complejo Cultural Los Pinos la histórica e inédita subasta de 82 vehículos, por la cual se espera recaudar un precio inicial de 30 millones de pesos a destinarse a dos municipios pobres del estado de Oaxaca.

El director general del Servicio de Administración de Administración y Enajenación de Bienes (SAE), Ricardo Rodríguez Vargas, destacó que esta subasta es histórica por el lugar donde se realiza y el número de participantes, pues se compraron más de 800 bases de venta, superior a las 600 registradas en la subasta de Santa Lucía.

En entrevista previa al inicio de este evento comercial, destacó que esta subasta presencial a martillo será la primera que se realice a nombre el nuevo “Instituto para devolver al pueblo lo robado”, en el cual se transformará el SAE una vez que se apruebe su marco legal.

Entre los vehículos destaca un súper deportivo Lamborghini Murciélago color gris, convertible, modelo 2007, con el precio de salida más alto, de un millón 472 mil pesos, pero también está un “vochito” gris oscuro modelo 1990, por solo 10 mil pesos, así como una camioneta marca Ford Shelby F150, modelo 2016, por un millón 214 mil 600 pesos.

Rodríguez Vargas consideró que esta subasta presencial a martillo es histórica porque se realiza en la exresidencia oficial de Los Pinos.

“Hoy nosotros empezamos a devolverle los bienes que fueron del pueblo, bienes que vienen de diversos ilícitos, hoy de acuerdo con el mandato del señor presidente, lo vamos a devolver al pueblo”, añadió al precisar que alrededor de la mitad de los autos son incautados por la Fiscalía General de la República y la otra mitad, transferidos por la Presidencia de la República.

El director general del SAE informó que todo el producto de la venta se destinará a dos municipios pobres y del estado de Oaxaca: Santos Reyes Yucuná y Santa María, entre los más marginados del país, con casi 100 por ciento de su población viviendo en pobreza y con carencias sociales.

El primero de ellos tuvo un presupuesto en 2018 de seis millones de pesos, con lo cual los 30 millones de recaudación inicial equivalen a cinco años de presupuesto para este gobierno local, lo que muestra la importancia de lo que reviste llevar los recursos a las zonas más marginadas del país, darles un destino claro, transparente y expedito.

Comentó que esta subasta es histórica también por las alrededor de 800 bases de licitación vendidas, a 100 pesos cada una; el mayor número de participantes en las subastas del SAE, lo cual quiere decir que la ciudadanía “quiere ayudar a transformar este país”.

El compromiso de lo que será el Instituto para Devolver al Pueblo lo Robado es que los recursos obtenidos en esta subasta de vehículos tenga un impacto pleno en la ciudadanía, como en hospitales, obras, caminos, entre otros.

Adelantó que también habrá una subasta de casas dentro de un mes, cuyos recursos se destinarán a la estrategia nacional contra las adicciones, y otra de joyas, a efectuarse dentro de dos meses. El dinero recaudado irá a municipios marginados de la montaña de Guerrero, una vez que se apruebe la Ley de Extinción de Dominio, con lo cual habrá una gran cantidad de bienes asegurados.

El SAE, que se transformará en el nuevo Instituto, detalló Rodríguez Vargas, estima vender mil 500 millones de pesos en lo que resta del año a través de subastas.

El surgimiento del nuevo Instituto para Devolver al Pueblo lo Robado está por aprobarse en el Senado de la República junto con la Ley de Extinción de Dominio, y otras disposiciones, con lo cual el SAE se transformará d forma sustancial para darle cabida a este instituto, indicó.