La economía mexicana sigue enfrentando riesgos con un sesgo negativo, entre ellos, los efectos que puedan tener el agravamiento reciente de las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China, y la posibilidad de que se extiendan a otras regiones, advirtió el Banco de México (Banxico).
En su reporte de Balanza de Pago al primer trimestre del año, también destacó como riesgos que la debilidad de algunas de las principales economías se prolongue más de lo anticipado, que haya nuevos episodios de volatilidad en los mercados financieros internacionales y que se intensifiquen algunos riesgos políticos y geopolíticos.
No obstante, algunos de los riesgos para el crecimiento de la economía mundial se moderaron como resultado, entre otros factores, del fortalecimiento de la expectativa de una postura monetaria más acomodaticia por parte de los bancos centrales de las principales economías avanzadas y del anuncio de nuevas medidas fiscales y monetarias por parte de China.
En ese entorno, en el primer trimestre de 2019 la economía mexicana siguió captando recursos a través de la cuenta financiera, principalmente, en los rubros de inversión directa y de cartera.
De enero a marzo de este año, la cuenta financiera presentó un endeudamiento neto que implicó una entrada de recursos por cuatro mil 634 millones de dólares, incluyendo un aumento de los activos de reserva por cuatro mil 424 millones de dólares.
El banco central precisó en su reporte que la cuenta corriente registró un déficit de cinco mil 634 millones de dólares y a su vez, la cuenta de capital resultó deficitaria en 35 millones de dólares.
De esta forma, el renglón de errores y omisiones exhibió un flujo positivo por mil 035 millones de dólares.
El déficit de la cuenta corriente de cinco mil 634 millones de dólares fue resultado de créditos por 128 mil 037 millones de dólares y débitos por 133 mil 671 millones de dólares.
Como proporción del Producto Interno Bruto (PIB), el déficit de la cuenta corriente se ubicó en 1.8 por ciento en el primer trimestre de 2019, nivel inferior al de 3.2 por ciento del PIB registrado en similar periodo de 2018.
El saldo negativo de la cuenta corriente en el primer trimestre de 2019 se derivó de la combinación de déficits en la balanza de bienes y servicios por dos mil 048 millones de dólares y en la de ingreso primario por 11 mil 075 millones de dólares, y de un superávit en la balanza de ingreso secundario por siete mil 489 millones de dólares.