Jorge Barrera Castellano, jefe del Departamento de Epidemiología de los Servicios de Salud de Nayarit alerta sobre el incremento de un cien por ciento en casos de hepatitis A, padecimiento viral que se presenta mayormente en preescolares y escolares, cuando éstos consumen agua contaminada o sin purificar.
“Los niños o las personas que tienen esta enfermedad esta decaída, no quiere comer, pero de repente empieza a ponerse los ojitos, lo que es lo blanco de los ojos amarillo, empieza a ponerse la piel amarillenta, empiezan a orinar de un color cada vez más obscuro, que puede llegar a ser hasta como dicen como Coca Cola y el excremento se empieza hacer mucho más claro, esto tiene que ver mucho más con la contaminación de agua, en los planteles educativos, por eso extremar precauciones en lavado de aljibes, tinacos, estar clorando el agua, tener cuidado con los sanitarios sí, entonces todo esto en esta temporada bueno tendremos que pedir algunas medidas preventivas sobre todo para evitar la deshidratación”.
Hasta el momento, explicó el Dr. Barrera Castellano, se tiene un registro y una contabilidad de 128 casos confirmados ya de hepatitis A: “estamos hablando de que tenemos 128 casos confirmados ya o registrados ya en nuestro sistema de vigilancia, 128 en comparación con el año anterior pues tenemos un incremento de casi un 100 por ciento de casos de hepatitis, entonces no podemos echar en saco roto esto, tenemos que darle seguimiento, es un padecimiento que bueno no, que en los niños no está generando mucho problema pero si deja de ir a la escuela, hay cierto grado de desnutrición porque no comen bien, etc. entonces si tenemos que cuidar eso”.
Finalmente, por parte del Dr. Barrera vendría el listado de recomendaciones para evitar y contra restar este padecimiento viral: “precisamente la vigilancia de la familia, los alimentos y el agua que se consume dentro de la casa pues quesea de condiciones, ya se agua embotellada, o que la desinfectemos con cloro, plata coloidal o hervirla, los alimentos como ya lo había mencionado bien cocidos y en la escuela bueno, pues pedirle a los directivos y a los docentes pues también estar vigilantes del agua que se está consumiendo dentro de la escuela, muchas de las veces, lo niños pequeños sobre todo no entienden el riesgo de pegársele a la llave directamente, de tomar del vaso del compañerito, que a lo mejor puede estar enfermo y así trasmitir la enfermedad”, apuntó.