La adopción de tecnologías como el blockchain varía de acuerdo al giro de cada comercio o industria, pero en el caso de la cadena de bloques permite a los usuarios tener transparencia y realizar transacciones seguras.

La tecnología blockchain se implementó por primera vez en el uso de criptomonedas como el Bitcoin, pero su aplicación no se limita a ese campo sino que se ha extendido a múltiples áreas.

En entrevista para Notimex, el fundador y director de la empresa Uxlon, David Leonardo Castillo Herrera, señaló que es importante reconocer la diferencia entre blockchain y criptomoneda, ya que esta última es sólo una aplicación de la primera.

“Blockchain es una tecnología que nos permite encriptar, es decir, codificar o proteger cierta información de manera segura, al ser cadena de bloques cada paso de esa encriptación va encadenada y encriptada; a través de ella se puede tener una accesibilidad y transparencia porque es muy difícil poder hacer un cambio de esa información”, señaló.

La imposibilidad de los cambios en la información contenida en la cadena de bloques radica en que cualquier modificación que se haga en la misma aparece en todos los bloques involucrados, es decir, la información está disponible para todos los participantes y no se queda centrada en algún punto.

“Es como si hacemos una fiesta y vamos a tener invitados, hacemos una lista y ponemos los nombres, pero la lista la voy a tener yo, eso es un aspecto centralizado, supongamos que alguien quiere acoplarse en esa fiesta, me puede robar la lista y apuntarse y no sabríamos quién o cómo lo puso”, ejemplificó.

La ventaja del uso de blockchain es que se maneja exactamente la misma información de los participantes, todos la tienen a la vista, de modo que un hacker debe tener acceso a la información que cada usuario posee para poder realizar algún tipo de fraude.

“En el blockchain se hace la misma fiesta y la misma lista, pero la copia de la lista la tienen todos los invitados, de modo que el resto sabe quién participa y quién no, esa parte de descentralización y encriptación hace a esta tecnología imposible de hackear”, señaló.

El uso de esta tecnología no se limita al uso de monedas en el rubro financiero ya que comienza a emplearse en distintas industrias con la creación de contratos inteligentes, los cuales ofrecen la seguridad de tener la información encriptada y no pueden ser modificados sin que se percaten los participantes.

El directivo indicó que la diferencia entre los contratos inteligentes y las criptomonedas es que estos se encuentran sustentados en las legislaciones de cada localidad.

En sitios como Estados Unidos esta tecnología se usa para la venta de activos de desarrollos inmobiliarios, de modo que es posible encontrar inversores interesados en la construcción en distintas partes del mundo de manera rápida.

En México ya empieza a emplearse el blockchain en la industria inmobiliaria y en la compra venta de insumos, ya que mediante contratos inteligentes es posible reunir a pequeños y medianos empresarios para que compren los materiales que necesitan de manera conjunta y a mejores precios, lo que le da más competitividad a las pequeñas y medianas empresas.

“Tenemos un contrato inteligente que nadie controla se puede tener confianza en el contrato inteligente y se tiene una garantía mutua.

“Nuestra plataforma está siendo apoyada por el presidente municipal de Ocotlán, ahí tenemos 380 muebleras listas para subirse y conseguir insumos a precios competitivos. Ahí no entra la criptomoneda es un tema de proceso y trazabilidad de la información”, indicó Castillo Herrera.

Otro uso que se puede dar a los contratos inteligentes se encuentra en industrias como la alimentaria, ya que es posible dar seguimiento a los productos desde que salen de su lugar de origen hasta que llegan a la mesa de los consumidores, con lo que es posible garantizar la calidad de los mismos.

La tecnología del blockchain ya se utiliza en la industria de las bebidas alcohólicas, debido a que así es posible reducir la adulteración de las mismas o el rellenado de botellas que en ocasiones se presenta.

“Casi el 40 por ciento de los vinos son adulterados y estamos desarrollando una plataforma para hacer la trazabilidad del licor, se hace un identificador en la botella y con puntos de control se actualiza el estado de la botella desde su fabricación hasta su consumo para saber la trazabilidad mediante escaneo, se marca como entregada o abierta”, explicó.

El uso de tecnología que descentraliza la información permite a los actores de una economía digital hacer contratos que les permitan tener la confianza de operaciones de venta y compra seguras, en un ambiente de transparencia propiciado por la trazabilidad de la información que compone al blockchain.