Frente a la demanda de educación entre la población joven y la importancia de la actualización de conocimientos en las actividades profesionales, la educación en línea se convierte en una alternativa aunque requiere consolidar su validez académica.
Esa fue una de las conclusiones de la tercera edición del Estudio sobre educación en Línea en México, presentado por la Asociación de Internet.mx, en el que se resaltó el crecimiento del interés que han mostrado los mexicanos para estudiar en línea.
Sin embargo, hay factores que impiden que estos estudios prosperen, entre ellos, se encuentra el reconocimiento que dan las empresas a la educación en línea en comparación con la educación presencial.
La oferta educativa pública es insuficiente para atender las necesidades de una población numerosa, como es el caso de la población joven en México.
Por ello, cinco de cada 10 personas optan por buscar entre las opciones privadas, sin embargo, los costos de las mismas dejan sin estudios a un número importante de personas.
Además, la digitalización de las empresas lleva a los trabajadores a buscar cursos que les permitan actualizarse, aunque el tiempo sea un factor a considerar, por lo que es necesario encontrar opciones que permitan adquirir conocimientos con flexibilidad de horarios.
Una alternativa es la educación en línea, misma que ofrece flexibilidad de horarios, dependiendo de la plataforma y a veces certificación oficial, especialmente cuando los cursos provienen de instituciones educativas.
Los estudiantes que adquieren sus conocimientos en línea deben comprometerse y esforzarse más por el simple hecho de que no tienen un docente al que daban responder.
No obstante, las empresas que buscan determinados perfiles para ocupar puestos de trabajo prefieren a quienes reciben educación presencial debido a que les da la impresión de que los conocimientos obtenidos incluyen la resolución de casos más prácticos.
El estudio reveló que para el 2019 el factor costo contribuyó a la decisión de tomar o no cursos en línea por parte de la población.
El 50 por ciento de las personas está dispuesta a pagar cinco mil pesos al mes por educación presencial, el 62 por ciento invertiría menos de cinco mil pesos por educación mixta, y para educación en línea poco más del 50 por ciento invertiría menos de dos mil pesos al mes.
El análisis mostró que tres de cada 10 personas que continúan sus estudios en línea lo hacen porque desean incrementar sus conocimientos, mientras que los otros siete buscan mejorar sus condiciones de empleo o trabajar para empresas transnacionales.
Además, la mayoría de los estudiantes percibe que las empresas dan más valor a los estudios en la modalidad presencial, en tanto que la modalidad mixta permite a quienes estudian tener las ventajas del modo presencial y de los estudios en línea.